VALÈNCIA (EFE). El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha manifestado el optimismo de la entidad y su "gran confianza" en un futuro "tremendamente ilusionante que aúna la búsqueda de la rentabilidad financiera con una aportación genuina a la sociedad".
En un vídeo dirigido a los accionistas del banco, Goirigolzarri asegura que la fusión con Bankia deja a CaixaBank "en un punto de partida privilegiado para encarar, con confianza, los importantes desafíos que como sociedad, como sector y como entidad debemos afrontar".
Sobre el negocio bancario, recalca la rentabilidad, eficiencia y solvencia de la entidad, "capaz de generar ingresos de una forma diversificada y recurrente".
En su repaso del año, Goirigolzarri destaca el peso de la fusión entre CaixaBank y Bankia, gracias a la cual se han convertido en la "mayor entidad financiera" de España, con 20 millones de clientes.
Un "motivo de orgullo" que interpreta, sobre todo, como una "enorme responsabilidad" hacia sus clientes y el resto de la sociedad.
El que fuera presidente de Bankia se refiere al "intenso trabajo" de los últimos meses, que culminó el pasado 14 de noviembre con el último paso, la integración tecnológica y comercial de las dos entidades.
Mención especial dedica al acuerdo alcanzado el pasado julio con los sindicatos en el marco del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) derivado de la fusión, para la salida voluntaria de 6.452 trabajadores.
Mientras tanto, continúa Goirigolzarri, CaixaBank ha seguido "apoyando a las empresas y familias en un contexto de reactivación de la economía", lo que ha permitido al banco "alcanzar buenos niveles de actividad y unos resultados muy satisfactorios".
Este escenario tiene su reflejo "en una mejora de la rentabilidad" de la entidad, "de sus beneficios y, por supuesto, de sus dividendos".
En este sentido, ha recordado que una vez eliminada la recomendación del Banco Central Europeo (BCE) de limitar dividendos, la intención es "retomar el pago del 50 % del beneficio neto consolidado, ajustado por los impactos extraordinarios de la fusión, en efectivo y en un solo pago".
Un guiño a los accionistas de cara a un futuro "en el que su confianza es clave, como propietarios que son de la entidad", concluye Goirigolzarri.