Caos en los juzgados valencianos ante las medidas para evitar el ciberataque

VALÈNCIA. El miedo a un posible ciberataque como el que se ha extendido por todo el mundo con el nombre del virus #wannacry ha llevado a Generalitat a restringir, desde el sábado, el acceso de jueces, fiscales y funcionarios a los programas informáticos e internet desde sus ordenadores, ni siquiera a la intranet, que es fundamental para su trabajo. 

Esto está generado el caos en los juzgados de la Comunitat Valenciana. En la Ciudad de la Justicia de València, los trabajadores se están viendo obligados a redactar en word todos los asuntos y no pueden acceder a cosas tan importantes como las requisitorias de prisión o las cuentas consignadas en los juzgados para, por ejemplo, comprobar que las fianzas o las indemnizaciones están abonadas en tiempo y forma.

En cuanto a los sistemas con los que jueces y fiscales trabajan, los representantes del Ministerio Público sí pueden entrar en Fortuny, pero de nada les sirve porque los expedientes y los informes están dentro de intranet y el acceso está restringido. Peor lo tienen los jueces, ya que ellos no pueden acceder al Cicerone y, por tanto, no tienen posibilidad de comprobar el estado de las causas pendientes.

Valencia Plaza ha hablado con la Fiscalía, cuyos representantes aseguran que no han recibido "ningún tipo de información o mensaje" alertando de lo que iba a suceder. Quienes han preguntado al respecto -varios magistrados han llamado- explican que les responden que "lo más probable" es que las restricciones continúen hasta el próximo miércoles, algo que genera bastante inquietud entre los afectados.

A mano

La solución que están adoptando desde los diferentes juzgados es realizar el trabajo a mano o en word, ya que es lo único que funciona. Todos los trabajadores están intentando que el ciudadano se vea lo menos afectado que sea posible. Una joven maltratada con la que este periódico ha hablado explica que ha ido esta mañana para hacer un apud acta. "Me lo han rellenado a mano las funcionarias del juzgado", ha relatado.

La imposibilidad de realizar el trabajo en tiempo y forma ha llevado a varios jueces y fiscales a irse a sus casas y trabajar desde allí. "No podemos quedarnos de brazos cruzados en el juzgado, por eso es mejor ir a casa y trabajar desde allí. Al menos adelantamos trabajo mientras se  soluciona el problema".

Todo ello contrasta con el mensaje de tranquilidad que desde la Conselleria de Hacienda se ha enviado. La Conselleria afirma que "los ordenadores se pueden utilizar con total normalidad, y que los funcionarios solo han tenido que evitar el envío y la recepción de mensajes con archivos adjuntos, como el resto de departamentos", una afirmación que Valencia Plaza ha podido comprobar que se queda corta, ya que no funciona ni la intranet.