VALÈNCIA (EP). "Lo importante de verdad es seguir juntos y que los españoles nos elijan para gobernar. Gracias a la dirección saliente, la de mi amigo el presidente Casado", proclamó Alberto Núñez Feijóo el 2 de abril de 2022, día en que fue elegido presidente con el 98,35 de los votos en el congreso extraordinario de Sevilla que sepultó la profunda guerra interna que durante meses había enfrentado a su predecesor y la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso.
Un año después, cargos del PP consultados por Europa Press ensalzan que Feijóo ha logrado "unir" y "pacificar" el partido, que tiene expectativas de ganar las elecciones del 28 de mayo después de siete años de derrotas en generales, autonómicas y municipales. Se trata de su primer examen a nivel nacional y el PP confía en arrebatar al PSOE feudos como La Rioja, Baleares, Comunitat Valenciana o Castilla-La Mancha, entre otros.
Eso sí, las mismas fuentes admiten que a Feijóo aún le queda el reto de derrotar a Pedro Sánchez en las elecciones previstas para final de año, donde se lo juega todo a una única carta. El propio líder del PP ya ha confesado públicamente que si no gana las generales, lo lógico será buscar a otra persona que pueda hacerlo y dejar la Presidencia del PP.
Algunos dirigentes 'populares' destacan cómo hace un año, tras la profunda crisis interna que afectó al PP y se llevó por delante la Presidencia de Pablo Casado, el partido "estaba casi muerto" y Vox tenía opciones de darle el 'sorpasso'. "Hoy somos la primera fuerza política en todas las encuestas", resume un histórico parlamentario, que concluye: "A rey muerto, rey puesto".
"Feijóo ha dado la vuelta a la tortilla. Los ciudadanos ven que podemos ganar. Sánchez tiene muy mala imagen y cae mal", añade otro veterano dirigente del PP que tuvo en el pasado asiento en 'Génova' y que subraya cómo Feijóo "lo arregló todo milagrosamente en una semana".
En 'Génova' también sacan pecho de la gestión de Feijóo este primer año. "Hemos conseguido un rearme a nivel orgánico, demoscópico e ideológico", presumen en su círculo más cercano, que lleva más de una década trabajando con él y que dejó Galicia tras cuatro mayorías absolutas en la Xunta para aterrizar en la sede nacional del PP en la madrileña calle Génova.
Además, en su equipo recalcan que Feijóo ha logrado "el ensanchamiento" y "crecer en las dos direcciones", captando voto del PSOE y de Vox, al tiempo que ha dado "serenidad" a las aspiraciones territoriales consiguiendo "unidad interna".
Fuentes de la cúpula del PP subrayan que todas las encuestas sitúan al Partido Popular como primera fuerza política, con una media de más de 30 escaños por encima del PSOE. Frente al 'parón' que han reflejado algunos sondeos, que apuntan a que los socialistas y Vox han cogido aire tras la moción de censura que ha tenido a Ramón Tamames como candidato, en el equipo de Feijóo niegan preocupación y exhiben sus propios datos internos, en los que saca siete puntos a los socialistas y 37 escaños de ventaja.
De acuerdo con esta encuesta interna del PP, basada en 2.500 entrevistas por teléfono a la que ha tenido acceso Europa Press, el PP lograría 143 escaños frente a los 106 del PSOE, que baja 1,3 puntos. Vox, que tiene ahora 52 diputados, cosecharía 45 diputados, y Podemos pasaría de 33 a 20 parlamentarios. La suma del Partido Popular y Vox daría una holgada mayoría absoluta de 188 diputados.
"No nos conformamos", aseguran en el cuartel general de los 'populares', que confían que una victoria del PP en las municipales y autonómicas de mayo permita a Feijóo "coger viento de cola" y empujar hacia ese Gobierno en solitario del que tanto ha hablado este último año, sin depender de los de Santiago Abascal.
Sin embargo, en algunos cargos del PP sí ha empezado a cundir cierto nerviosismo por la "resistencia" de Pedro Sánchez, que parece haber taponado en parte el trasvase de votos del PSOE al PP de los últimos meses y que los 'populares' habían cifrado en unos 800.000 votantes.
Otros cargos más veteranos, que estuvieron en el pasado en las cocinas de 'Génova', minimizan la situación alegando que hay "voto oculto" y que la campaña se decide al final. "Algunos en el PP son unos ansiosos, viven al día y solo ven el momento", confiesa en privado un diputado con muchas legislaturas a sus espaldas.
De la misma manera, otro dirigente que formaba parte del equipo de dirección de Mariano Rajoy no cree que pueda hablarse de frenazo de Feijoo en las encuestas porque, a su juicio, hay que tener en cuenta que es "imposible mantener el nivel de crecimiento electoral que el partido cosechó tras el congreso de Sevilla y la mayoría absoluta en las andaluzas de junio.
Otros dirigentes comparten la misma opinión alegando que no hay que "inflar demasiado pronto las expectativas". De hecho, las fuentes consultadas recuerdan lo que ocurrió en las elecciones de Castilla y León, que se convocaron pensando que se lograría una mayoría absoluta y al final Alfonso Fernández Mañueco tuvo que pactar con Vox.
Pese a las propuestas de acuerdo que ha lanzado a Pedro Sánchez -en materia económica, energética, Justicia, así como seguridad y defensa-, Feijóo no ha logrado sellar ningún pacto de Estado con el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos en este año al frente del PP.
En octubre, tras una reunión en Moncloa entre Sánchez y Feijóo tras la dimisión de Carlos Lesmes como presidente del Supremo, comenzaron de nuevo las negociaciones para reformar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), pero pocas semanas después descarriló por la reforma del delito de sedición que impulsaba el Ejecutivo.
Feijóo también presentó en Cádiz un plan de calidad institucional para "regenerar las instituciones" que promete aplicar en sus primeros cien días de gobierno si llega a Moncloa y que quiere trasladar a las comunidades autónomas y ayuntamientos a partir del 28 de mayo.
En la anotación del debe, algunas fuentes del PP aluden a "algunos errores" de Feijóo que tanto el Ejecutivo como otros partidos han magnificado en las dos últimas semanas, como el acto en Madrid con una predicadora, recurrir a Francia en la reforma de las pensiones cuando las calles están allí "ardiendo" o referirse a los gobernantes "autócratas" coincidiendo con la cumbre iberoamericana a la que asistía el Rey. "Es fruto de la sobreexposición porque cuando hablas todos los días cometes errores", asegura un dirigente 'popular'.
La cúpula del PP se afana en diferenciarse de Vox, un partido que, según los 'populares', busca "erosionar" al Partido Popular como se evidenció en la reciente moción de censura y que se ha convertido en "balón de oxígeno" para Pedro Sánchez.
"Yo ofrezco una España normal y una política para adultos", proclamó Feijóo justo después de esa moción de censura, tras criticar la política "infantil y populista" de los de Abascal y de Pedro Sánchez.
En 'Génova' esperan que el mapa se tiña de azul el 28 de mayo y que ese resultado electoral sea un revulsivo ante las generales que impulse a Feijóo por encima de los 150 diputados, de forma que no tenga necesidad de tener que llegar a un pacto de gobierno con Vox si gana en diciembre.