MADRID (EP). Carlos Slim ha notificado a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) la toma de control de FCC, así como de las empresas participadas del grupo constructor Realia y Cementos Portland.
El empresario remitió su notificación al 'superregulador' el pasado 11 de abril, una semana después de que el día 5 lanzara formalmente la oferta pública de adquisición de acciones (OPA) sobre el 100% del grupo constructor, en el que ya controla un 31,3% del capital y del que Esther Koplowitz es segunda accionista.
En concreto, Slim, a través de su empresa Inversora Carso, ha comunicado que se hará con el "control exclusivo" de FCC y, por ende, de las compañías que a su vez controla el grupo, la inmobiliaria Realia, en la que tiene un 36,8% y Cementos Portland, donde ostenta un 77,9%.
En el caso de Realia, el magnate tiene asimismo lanzada una OPA por el 100% del capital de la compañía, dado que superó el 30% de su capital en virtud de una ampliación de capital.
En cuanto a Cementos Portland, Slim ha avanzado que prevé plantear al consejo de FCC lanzar una OPA de exclusión sobre este fabricante de cemento para excluirlo de cotización en Bolsa.
En la actualidad, tanto la OPA sobre el 100% de FCC como la OPA por Realia están pendientes de recibir las pertinentes autorizaciones por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Con ambas operaciones, Slim ratifica el compromiso que ha venido manifestando con el grupo FCC y su proceso de saneamiento y reestructuración desde que a finales de 2014 entró en el capital de la firma en la que Esther Koplowitz se mantiene como segunda socia con un 22,4% de su capital.
Este compromiso ha llevado al magnate a financiar a Koplowitz e incluso a garantizar frente a los bancos la deuda que la empresaria tiene vinculada a su participación en la constructora.
En virtud de estos acuerdos, la Ley de OPAs atribuye a Slim el control del 53% de FCC, si bien el mexicano asegura no tener los derechos de voto del 22,4% de Koplowitz, sino sólo del 31% que controla directa e indirectamente.
Carlos Slim comunica a la CNMC su toma de control de FCC en cumplimiento de lo establecido en la Ley de Defensa de la Competencia, que en su artículo 8.1b indica que es preciso comunicar los movimientos corporativos cuando el volumen de negocios global de los partícipes en la operación supere los 240 millones de euros.