Los vecinos del Barrio de Penyaroja están muy enfadados con Usted, Señor Alcalde, y tienen motivo para ello, no solo no les ha escuchado, sino que arruina cualquier oportunidad que le brindan para solucionar este disparate que es la recalificación del suelo público dotacional de Penyaroja.
Este jueves se vota en el Pleno del Ayuntamiento la inadmisión del Recurso de Reposición presentado por la Plataforma de Vecinos por Penyaroja contra el Acto de Aprobación Provisional de la Modificación del PGOU acordado por el pleno el 28 de febrero de 2019, una inadmisión que se funda única y exclusivamente en que todavía ha de pronunciarse la Generalitat Valenciana sobre el mismo, mediante la aprobación superior, pero que no termina de valorar la indefensión que causa a los vecinos, los vicios del procedimiento denunciados con tal Recurso.
A diferencia de lo manifestado en la resolución de inadmisión del recurso de reposición que previsiblemente será aprobada, la resolución de 28 de Febrero que los vecinos impugnan, si se trata de un verdadero acto de trámite cualificado que les genera indefensión por dos razones muy claras y evidentes:
Primero porque se ha omitido el trámite de “celebración de las sesiones explicativas, resúmenes e infografías” del artículo 51. 4 de la LOTUP que correspondía hacer con carácter previo a a la Resolución impugnada. Dicho tramite es obligatorio porque la modificación del PGOU tiene carácter estructural al afectar a equipamientos que forman parte de la Red Primaria de dotaciones públicas, y por entender que ha existido un incremento del aprovechamiento lucrativo, argumento que se desarrolla ampliamente en el Recurso gracias al asesoramiento e inclusión de las valoraciones técnicas de una arquitecto especialista en Urbanismo. Los tramites no efectuados por el Ayuntamiento y especialmente las sesiones explicativas, suponían el acercamiento a los vecinos para recabar su opinión, cuestión que este Ayuntamiento no ha buscado en ningún momento.
En segundo lugar porque es una evidencia física y obvia que existen 17 páginas de más que se presentaron en la aprobación final del Plan y que se corresponden con el Informe de Sostenibilidad Económica, que no fueron presentadas en la fase de exposición al público y por tanto no se pudo tener acceso a ellas hasta la aprobación.
Los vecinos quieren que el Ayuntamiento de un paso atrás y se siente a escuchar y a dialogar con ellos, que les expliquen en que beneficia esta actuación al barrio de Penyaroja y cuanto verdaderamente les perjudica, y ese trámite que es un derecho de los vecinos que exigía cumplir la Lotup, ustedes lo han obviado, porque sabían que los vecinos no iban a admitir que se les quitase el suelo público de su Barrio cuando existían otras opciones menos gravosas para solventar la situación, como el de entregar suelo Residencial Libre en poder del Consistorio.
Obviar los tramites de participación pública, no aportar partes del expediente en fase de exposición pública e impedir no poder alegar sobre ello en la fase oportuna, son actuaciones que podrían haber hecho cambiar a los entonces concejales el sentido de su voto en la aprobación por el pleno de la recalificación y por tanto claro que generan indefensión, y revisten la actuación de nulidad y por eso este Recurso debería ser admitido y no lo está. Su proceder no deja de interperlarnos una y otra vez con la misma pregunta ¿Por que tienen tanta prisa en sacar adelante este plan?
Con independencia de las razones jurídicas, lo cierto es que han perdido una oportunidad de hacer borrón y cuenta nueva, de volver atrás a rehacer lo mal hecho y sobre todo de recomponer las relaciones con todo un Barrio al que lo único que le ha manifestado el alcalde y el equipo de gobierno es el de la expresión del ninguneo y consecuentemente del desprecio.
Pero no acaban aquí los nubarrones y las dudas sobre esta recalificación les espera un camino judicial complicado. Sabe el Ayuntamiento bien, y si no debería saberlo, que los mismos argumentos que llevaron al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana a declarar nulo el plan de Tabacalera, son plenamente aplicables a una modificación del PGOU que pretende plantar un rascacielos a 5 metros del Campanario de la Iglesia de los Mártires, o ceder el único suelo público de una Sección que esta completamente consolidada y carece de ninguna dotación pública.
Por tanto también se agradecería que este Ayuntamiento dejase de mentir sobre los motivos que le llevaron a este plan, no les obligó el fallo de ninguna Sentencia, ni siquiera se expresa por fallo judicial derecho alguno a favor del constructor. Habían múltiples soluciones que no pasaban por utilizar suelo público en caso de que hubiese sido necesario indemnizar al constructor, cosa que no sabremos nunca porque entre otras cosas no han tenido el mismo empeño en buscar las razones de la desestimación de este recurso que en averiguar si el constructor tenía derecho o no a una indemnización.
El equipo de Gobierno ha tomado una decisión política y debe responder de ella, pero también responderá en los tribunales, los vecinos de Penyaroja están agrupándose contra esta decisión y la Plataforma de Vecinos de Penyaroja ya ha conseguido que más de 800 familias se unan para llevar adelante una única defensa letrada.
Pero además hay más dudas sobre las verdaderas intenciones del equipo de Gobierno y del entonces Concejal de Urbanismo ¿Hubieron negociaciones con el Constructor previas a la propuesta de Urbanismo? La prensa dice que si ¿Se pactó con el Constructor que terrenos iban a ser ofrecidos? No es muy usual que un Ayuntamiento elija deshacerse de suelo público en una zona completamente consolidada. ¿Porque no se firmó un Convenio con el Constructor con plena transparencia y con conocimiento del contenido de las negociaciones?
Y finalmente teniendo en cuenta que el PSPV denunció ante fiscalía en el año 2009 un presunto trato de favor y un exceso en la adjudicación de metros por el anterior Consistorio con el constructor en el plan Tabacalera, denunciando la entonces portavoz, y hoy fallecida, Carmen Alborch, que había existido unos beneficios privados de más de 100 millones de euros
¿Por que el PSPV cuando llega a la Concejalía de Urbanismo no destina sus recursos a investigar lo que denunciaba estando en la oposición? ¿Por que el Concejal de Urbanismo decidió que la mejor opción para satisfacer el derecho del Constructor era la de ceder los terrenos de Penyaroja?
¿Pueden explicar su cambio de postura a la ciudadanía?
Para terminar, se ha sabido que la constructora Guadalmedina realizó a causa de la anulación del plan de Tabacalera una reclamación de responsabilidad patrimonial al Ayuntamiento de València que se instruyó en expediente administrativo (E-0135-2018-000062). Este ayuntamiento tiene que ser transparente y contestar a varias preguntas porque los hechos por lo que preguntamos revisten una enorme gravedad:
¿Que reclama Guadalmedina exactamente al Ayuntamiento? ¿Que decisión tomó el Ayuntamiento respecto a esta reclamación? ¿Cuales son las razones de la decisión tomada por el Ayuntamiento en este expediente? ¿Coincide con la decisión de indemnizar al constructor que se hace en la recalificación de Penyaroja? ¿Recayó resolución en este expediente antes que se adoptara la decisión de la Recalificación?
En definitiva ¿hay dos resoluciones de este mismo Ayuntamiento sobre la misma pretensión del Constructor que son contradictorias? Porque si es así este procedimiento es nulo de pleno derecho.
Respondan a estas preguntas, reflexionen sobre las consecuencias de seguir hacia adelante con un plan que muy probablemente declararan nulo los tribunales, piensen en todos los principios que han traicionado hasta llegar aquí, como han tirado por el suelo su defensa del suelo público, como han desprestigiado su apuesta por la participación pública y como han dinamitado sus buenas intenciones sobre la transparencia.
Señores Concejales piensen y voten en contra de la inadmisión del recurso, volvamos al principio, hagamos las cosas bien, escuchen a los vecinos de Penyaroja y busquemos una solución que no perjudique al Barrio y a sus familias. Estamos en tiempo de descuento, pero todavía estamos a tiempo.
José Salvador Tárrega Cervera Presidente de la Plataforma de Vecinos por Penyaroja