Defiende que la reforma laboral "no se tiene que derogar, sino que hay que intensificar la flexibilidad y los convenios de empresa"
VALÈNCIA (EP). El presidente del PP, Pablo Casado, ha apelado a Cs a ser "responsables" y a que "no desbloqueen" una tramitación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que ha advertido que son "la semilla de una nueva recesión para España". "Hago una apelación a Cs a que en esto seamos responsables, vayamos juntos y no facilitemos un mal presupuesto que es la semilla de una nueva recesión para España", ha subrayado.
Casado se ha pronunciado en estos términos en un coloquio en València, en el marco del XXI Congreso Nacional de la Empresa Familiar que se celebra hasta este martes en el Palacio de Congresos de la ciudad, tras ofrecer una conferencia en la que ha desgranado su plan para mejorar la competitividad y que pasa por una bajada de impuestos.
En el turno de preguntas de los empresarios presentes en esta jornada, Casado ha mostrado "su honda preocupación" por las cuentas que ha presentado el Gobierno y, por ello, ha hecho una apelación a la formación de Albert Rivera para que "no desbloquee una tramitación de los presupuestos".
"No podemos facilitar que el Gobierno de España haya mandado unas cuentas con una senda de déficit no aprobada en el Parlamento español y que ahora intente modificar la Ley de Estabilidad Presupuestaria no dejando que el Senado cumpla el mandato legal", ha remarcado el líder 'popular'.
A su juicio, las cuentas son "negativas" porque "no hacía falta una expansión de gasto ni una subida de impuestos" como la que plantea. En este sentido, ha explicado que cuando llegó el PP al gobierno en 2011, en España se recaudaban 160.000 millones de euros en impuestos y ahora son 210.000 millones, y esto año va a haber unos 20.000 millones más, de los que unos 12.000 millones son directamente de la Agencia Tributaria.
Por tanto, ha insistido en que "no hace falta recaudar más, sino todo lo contrario. Se podrían bajar impuestos o se debía amortizar deuda y cumplir con la bajada del déficit", ha remarcado. Además, ha criticado "la falta de rigor de los socios del Gobierno" que son la "izquierda populista que pedía una expansión del gasto no justificada" y "cómo se han plasmado, con unas previsiones que según la Airef no son rigurosas", ha agregado.
Además, ha subrayado que tampoco "es cierta" la previsión del gasto y ha advertido de que estas cuentas "ponen en riesgo la recuperación" en un momento en el que el resto de países bajan impuestos y los competidores "hacen los deberes para que nos les pille de nuevo una crisis brutal". "En España se hace justo lo contrario", ha reprochado.
Para Casado, el "problema de todo esto es que no va a valer para nada" porque "los supuestos ingresos para financiar un gasto que no es necesario se lo va llevar la pérdida de credibilidad de la economía española en el coste de la deuda", ha manifestado.
Ya en su intervención en la conferencia, Casado ha destacado el papel social de la empresa familiar en España y ha lamentado la "injustificada ausencia de reconocimiento" que tienen como "grandes contribuyentes" a los impuestos y al Estado de Bienestar. En este sentido, ha trasladado al auditorio de empresario que los planes de su formación "no distan" de los de ellos y "lo que tiene que hacer un partido es no molestar a las empresa y crear un entorno regulatorio, fiscal y laboral que favorezca la creación de empleo y de generación de riqueza".
Así, ha explicado que este plan pasa por "una agenda de competitividad para España" con una fiscalidad en la que se baje el impuesto de sociedades al 20%, una bajada del IRPF al 40%, una supresión por ley del impuesto de patrimonio y la supresión del impuesto de donaciones y sucesiones.
Asimismo, ha mostrado su compromiso con que las cotizaciones sociales no suban, sino que "bajen para favorecer la contratación" y ha rechazado una tasa a las transacciones financieras, a las tecnológica y al diésel. "Por tanto, una fiscalidad baja que nos permitiría competir si es posible en la media de los países que nos encontramos, pero más aún para converger en renta", ha subrayado.
Respecto al mercado laboral, ha defendido la reforma aprobada por el anterior gobierno del PP porque, a su juicio, ha motivado "el segundo milagro económico en las últimas décadas" al permitir la contratación de 2,7 millones de personas.
Por tanto, ha subrayado que esa reforma laboral "no se tiene que derogar, sino que hay que intensificar la flexibilidad y los convenios de empresa frente a los sectoriales", ha defendido.
Casado también ha propuesto que las cotizaciones sociales se publiquen en la nómina porque los trabajadores "tienen que ser conscientes de los costes laborales" y acabar con la "hipertrofia directiva" y burocrática con el fin de conseguir "una unidad de mercado para que sea fácil emprender y no haya trabas ni rigideces administrativas que lastren la competitividad y la seguridad jurídica" de las empresas.
Para Casado, también es necesario una Ley educativa que cuente con materias troncales a nivel estatal y en la que haya libertad de elección de los padres de colegio para que "ningún político decida por un código postal el colegio", y que recoja, asimismo, la posibilidad de los colegios a elegir su propio currículum educativo.
De igual modo, ha defendido la evaluación pública de conocimientos. "Pública porque sea conocida por todos y porque sea estatal" y que esa capacidad de evaluación tenga "cursos puentes" de manera que la FP esté "prestigiada" y "siga siendo un vector de desarrollo para nuestro país".
También, ha apostado por una educación que sea bilingüe o trilingüe en las autonomías que cuenten con lenguas cooficiales. "Nuestros hijos no compiten ya con los de Murcia, sino con los de Canadá o Francia", ha señalado.
Finalmente, Casado ha considerado que "hace falta inspección educativa a nivel estatal eficaz" y "un MIR educativo a nivel nacional" para prestigiar al profesorado. Por otro lado, ha insistido en la necesidad de que haya una adaptación a la revolución digital y por la internacionalización de las empresas.
El presidente del PP ha vuelto a pedir al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la convocatoria "cuanto antes" de unas elecciones generales en España porque "hay demasiadas situaciones insólitas para la estabilidad política y económica del país". Mientras tanto, ha subrayado, su formación hará una oposición "responsable".
Al respecto, el líder de los 'populares' ha insistido en la convocatoria "cuanto antes" de unas elecciones generales ya que ha señalado que el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, accedió al ejecutivo a través de una moción de censura "apoyada por batasunos y partidos populistas, con 50 escaños menos que el partido que había ganado las elecciones y con un mandato claro que era convocar elecciones" cuanto antes.
Por tanto, a su juicio, "hay demasiadas situaciones insólitas para la estabilidad política y económica de una país". "Pedimos que si la estabilidad de España depende de partidos que quieren romperla, que lo mejor es que los españoles decidamos qué reparto de poder político y apoyo político tenemos que tener", ha remarcado para puntualizar que lo que le preocupa es que "se pacten en la cárcel unos presupuestos o que las peticiones presupuestarias las haga un partido caracterizado por arruinar economías como Ecuador, Bolivia o Venezuela".
Mirando al futuro y hasta que haya elecciones, Casado ha subrayado que su formación llevará a cabo una oposición "responsable". "Lo digo por aquellos que dicen que el PP no rema a favor y habla mal de España o es muy duro. Nosotros no hablamos mal de España, pero podemos discrepar de la política presupuestaria de un gobierno y un partido determinado", ha afirmado.
Por otro lado y preguntado por si cree que la aplicación del artículo 155 es la única opción viable a corto plazo para resolver el conflicto en Cataluña, ha afirmado este extremo. "Por desgracia sí. Hay quien piensa que a nosotros nos gusta mucho decir que ya no vemos capacidad de negociación con los partidos nacionalistas o que ya no hay nada que hablar con quienes quieren romper España; evidentemente no es algo que nos alegre pero, por desgracia, es ya una constatación objetiva", ha afirmado Casado.
Para el líder del PP, lo que está pasando en Cataluña "no pasaría en ningún país del mundo" y, en este sentido, ha lanzado una pregunta al auditorio: "¿Qué harían ustedes si el 10% de sus trabajadores decidieran dividir el sector productivo de esa empresa o atacar con fórmulas de kale borroca en contra de las normas internas? Imagino que intentarían hacer lo que hicimos nosotros, que es ir conjuntamente y hacer cumplir la normativa".
Casado ha indicado que en la primera reunión que tuvo con Sánchez ofreció la mayoría absoluta del PP en el Senado para aprobar de nuevo el artículo 155 pero con "dos condicionantes: que se tiene que aplicar sin un plazo de duración hasta que la situación de legalidad, de prosperidad y convivencia se recupere y que tiene que abordar las competencias de los medios de comunicación públicos, la educación, servicios de seguridad y las instituciones penitenciarias".
"La situación es insostenible y vemos que hay un Gobierno que no responde a este desafío", ha reprobado para considerar que la última aplicación del 155 resultó "escasa" y, por tanto, hay que hacerlo "de otra forma" para que "de una vez por todas en Cataluña no se vaya en contra de la Constitución y la convivencia".
Además, ha defendido que los meses que duró la aplicación de este artículo Cataluña "recuperó la normalidad" y "un país serio como España no puede ser rehén de dos millones personas", ha zanjado.