CASTELLÓ. (EFE) La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, ha visitado este viernes las obras que permitirán regar con más de 53.000 metros cúbicos de agua regenerada una superficie de 39.500 metros cuadrados para potenciar el uso sostenible de los recursos hídricos.
Marco se ha interesado por las obras en la ronda Norte y Bulevar Río Seco, las dos zonas que se han añadido a los otros proyectos en marcha, las cuales "consiguen que Castellón avance como ciudad sostenible aprovechando todos los recursos disponibles para evitar el malgasto de agua", ha subrayado.
En concreto, las obras ahora en ejecución permitirán el riego con agua regenerada de una superficie de 39.567 metros cuadrados distribuida en varios puntos de la ronda Norte, la avenida del Riu Sec y el parque del Pont de Ferro con un volumen anual de agua de 53.020 metros cúbicos, "lo que equivale a 21 piscinas olímpicas", ha detallado la primera edil en su visita a las obras.
En la visita también ha participado el concejal de Ordenación del Territorio, Rafa Simó, y los técnicos de Facsa Manolo Breva, jefe de abastecimiento de Castellón; Miguel Ángel Martínez, técnico de explotación del abastecimiento y Joaquín Ribes, encargado general del abastecimiento de aguas potables.
Hasta ahora se utilizaba agua regenerada en el riego del parque litoral de la playa del Pinar y el parque del Pinar, en una superficie de 160.800 metros cuadrados. Y desde el pasado mes de marzo esta superficie se incrementó en 197.760 metros cuadrados más y suma espacios verdes como los ubicados en el bulevar Blasco Ibáñez, el parque Manuel Babiloni del Auditori, el de Rafalafena, el PAU Lledó y las zonas verdes de la ronda Norte.
Marco ha reiterado la importancia de impulsar proyectos que contribuyan a "hacer una mejor gestión del agua y que supongan un mayor y mejor aprovechamiento de recursos alternativos como el que generan las depuradoras".
Para la reutilización directa de las aguas, el Ayuntamiento ha obtenido previamente la autorización de la Confederación Hidrográfica del Júcar y es el responsable de la realización de los análisis y controles exigidos y previstos en el programa de autocontrol de la calidad del agua regenerada.
El tratamiento de regeneración consiste en un pretratamiento, un proceso de decantación primaria, un tratamiento biológico, un proceso de decantación secundaria, un tratamiento terciario y, finalmente, una línea de fangos.