VALÈNCIA (EP). La alcaldesa de València, María José Catalá, ha defendido este miércoles que su gobierno es "el único que está tomando medidas" para "frenar" la llegada de megacruceros a la ciudad, frente a la, a su juicio, "inacción de la izquierda durante ocho años", a la que ha acusado de no haber hecho "absolutamente nada" al respecto en ese periodo.
De esta manera se ha manifestado la primera edil, en una publicación en su perfil de 'X' (antigua Twitter), en la que ha reivindicado que el Ayuntamiento de València apuesta por un turismo "sostenible y de calidad", con medidas como la prohibición de embarcaciones como los megacruceros, puesto que, en su opinión, "no tienen un impacto positivo" en la capital.
En este sentido, Catalá ha mencionado que el pasado mayo anunció "la prohibición de los megacruceros a partir de 2026" en la ciudad, una decisión que ha incidido en que se tomó "consensuada" con la Autoridad Portuaria de València (APV) y que cumple "con el periodo de planificación de dos años con los que trabajan las operadoras".
Este martes, Compromís criticó el "alto coste ambiental" y el "escaso impacto económico" que suponen las visitas de cruceristas a la ciudad, censuró "la llegada de 14.000 en dos días" y reclamó al gobierno local que forman PP y Vox "medidas urgentes para reconducir este turismo de beneficio cero".
Mientras, el PSPV, este miércoles, ha pedido que se reabra "el debate sobre implantar una tasa turística a los cruceros" y ha censurado "la llegada masiva de cruceristas" a la ciudad al considerar que "no genera ningún impacto económico" y "repercute en los servicios públicos".