En la sentencia, dada a conocer esta semana, el TS insistió en que la experiencia obtenida al trabajar en residencias de mayores de carácter privado es equiparable a la adquirida en las públicas porque ambas pueden considerarse instituciones sanitarias, por lo que deben ser reconocidas como tal en los procesos de selectivos de la administración pública.
Como presidente del Cecova, Juan José Tirado ha celebrado que esta "reivindicación constante" por parte de la entidad autonómica colegial haya sido refrendada por el Supremo para "hacer justicia a una situación que suponía un inaceptable agravio comparativo".
"Siempre hemos defendido que las funciones de Enfermería son las mismas estés donde estés. La única diferencia radica, en todo caso, en las actividades y tareas que se llevan a cabo en cada servicio", ha aseverado, y ha defendido que "cualquier contrato en el que ponga enfermera o enfermero debe tener siempre la misma consideración y valoración a todos los efectos".
Un argumento que va en la línea de lo expresado por el Supremo al dictaminar que los servicios prestados "no dependen de que lo sean en instituciones públicas o privadas, sino que estaban determinados por la actividad realizada".
El Cecova ha aplaudido la sentencia, pero ha remarcado que "todavía queda mucho camino por recorrer para conseguir una equiparación real de las condiciones laborales y salariales de las enfermeras que trabajan en residencias públicas y privadas".
Además, ha puesto en valor la creación meses atrás de una comisión sociosanitaria en el seno de la entidad para analizar, abordar e intentar resolver los principales problemas de las enfermeras y enfermeros que trabajan en este sector.
El 80% en residencias privadas
"Las enfermeras que optan por el sector sociosanitario, que en la actualidad presentan una proporción de 80% en el área privada frente al 20% de la publica, se enfrentan a aspectos profesionales en desventaja como suelen ser remuneraciones más bajas, menor formación, escaso reconocimiento y el freno constante a cuestiones como el desarrollo profesional o la movilidad", ha advertido.
En esta línea, el presidente de la entidad ha resaltado el papel de la enfermera y el enfermero del sector sociosanitario "por el progresivo envejecimiento de la población y el cambio en el patrón de las enfermedades, que ha acarreado un considerable aumento del número de personas con un alto nivel de dependencia, así como un incremento de las situaciones de cronicidad y pluripatología".
Y ha reiterado la petición de "un cambio de paradigma donde estos profesionales sean reconocidos como pieza clave de la continuidad de los cuidados y puedan desarrollar con el aumento del ratio necesario una labor de fomento del autocuidado tan necesario para el mantenimiento de nuestro actual sistema de salud".