La nueva propuesta de proyecto de revisión del PES para próximos años sustituirá LA vigente
La CHJ contempla posibles reducciones de los caudales ecológicos en casos de sequía prolongada
El presidente de la CHJ, Miguel Polo, en una imagen de archivo. Foto: CHJ
4/10/2024 -
VALÈNCIA (EP). La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha presentado este viernes sus propuesta de revisión del Plan Especial de Sequía (PES), que entre sus novedades contempla posibles reducciones en las exigencias de los caudales ecológicos para escenarios de sequía prolongada.
La nueva propuesta de proyecto de revisión del PES para los próximos años sustituirá al actualmente vigente, que data de noviembre de 2018. Se trata de un documento que establece diferentes medidas y acciones dirigidas a minimizar los impactos ambientales, económicos y sociales de los episodios de sequía, así como garantizar la disponibilidad del agua para asegurar los usos existentes y la salud de la población.
Este nuevo documento añade cambios respecto al presentado en marzo de 2023 y está en consulta pública junto al Estudio Ambiental estratégico, durante 45 días hábiles, desde el pasado 18 de septiembre.
El presidente del Organismo, Miguel Polo, ha realizado una radiografía de cómo se encuentra actualmente la demarcación, con una declaración de situación excepcional por sequía extraordinaria, a diferencia de la situación existente en marzo de 2023.
La Jefa de la Oficina de Planificación Hidrológica (OPH), Arancha Fidalgo, ha detallado algunas de las nuevas medidas que incorpora el PES, tanto para escenarios de sequía prolongada como de escasez hídrica. Para el primero de los casos, el documento contempla posibles reducciones en las exigencias de los caudales ecológicos y las condiciones en las que se puede aplicar dicho caudal menos exigente.
Respecto a las medidas relacionadas con la escasez hídrica, este nuevo documento contempla cambios según los diferentes escenarios. De esta manera, se incide en la necesidad de agilizar los trámites de evaluación ambiental de los pozos de sequía cuando un sistema de explotación esté en normalidad, para que estos estén activos cuando sea necesario.
En escenario de prealerta, alerta y emergencia, se propone, entre otras cuestiones, la activación de planes de ahorro o planes de emergencia de los abastecimientos urbanos y su comunicación al Organismo, así como el seguimiento y detención de medidas de incremento de recursos si se identifica alguna afección sobre el medio ambiente.
También se han incluido cambios en el programa de medidas específicas para cada una de las unidades territoriales a efectos de escasez. Uno de los más importantes tiene que ver con la inclusión de dos volúmenes umbral mínimos para cada uno de los embalses gestionados por la Confederación.
"Establecemos un volumen crítico que supondrá la restricción total a efectos de explotación y un volumen mínimo de riesgo, que se traducirá en un incremento de la vigilancia y seguimiento ambiental, y el análisis de la puesta en marcha de acciones de gestión ambiental o incluso limitaciones en la explotación", ha explicado la Jefa de la OPH.
Por otra parte, ha señalado que la propuesta incluye la recomendación de la redacción de planes de emergencia agrícolas en situación de escasez por parte de los usuarios. Se trata de un documento que permitiría "anticipar y mitigar" los problemas generados por la sequía, incluyendo, por ejemplo, diferentes acciones para el ahorro de agua o una selección de cultivos idónea para cada escenario.
Estudio ambiental estratégico
La Jefa de Área de Planes y Estudios de la OPH, Nieves Mondéjar, ha explicado las líneas generales del Estudio Ambiental Estratégico, otra de las grandes novedades incluidas en la nueva propuesta de proyecto de revisión del Plan.
Se trata de un documento que identifica aquellas acciones del PES que pueden generar algún tipo de efecto negativo sobre el medio ambiente, como puede ser la reutilización de aguas residuales regeneradas o la explotación de pozos de sequía.
De esta manera, el estudio analiza estas variables y propone una serie de medidas que permitirán corregir o compensar los posibles efectos negativos generados sobre el medio ambiente. "El estudio ambiental ha sido una oportunidad para analizar las interacciones de las decisiones del PES con los objetivos ambientales y mejorar las medidas de prevención y de recuperación una vez pasada la situación crítica", ha comentado Nieves Mondéjar.
