Miembros de la cúpula de Ciudadanos en una reunión interna. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. Ciudadanos se enfrenta en mayo de 2019 al reto de aumentar la fuerte representación que obtuvo en los pasados comicios que se sustentó en 13 escaños en Les Corts y seis concejales en el Ayuntamiento de València. Un objetivo para el que está decidido a "buscar talento" -así lo asegura un alto cargo de esta formación- fuera del partido de cara a la confección de las candidaturas autonómicas y locales.
La posibilidad de crecer no es descabellada para la formación naranja, que ha recibido en algunos sondeos buenas noticias respecto a un ascenso en la próxima cita con las urnas. Bien es cierto que el partido de Albert Rivera, suele estar especialmente sujeto a fuertes fluctuaciones en las encuestas fruto de los vaivenes de la política estatal que, además, han tenido consecuencias claras en determinados estudios electorales autonómicos y locales. Aún así, en líneas generales, la formación naranja puede permitirse soñar en la Comunitat Valenciana con ciertas expectativas de crecimiento que le hagan determinante.
Para ello, su plan es poner toda la carne en el asador en las candidaturas autonómicas y locales, especialmente en los grandes municipios como València. Al igual que le ocurrió en 2015 a Podemos, Ciudadanos ha pagado en cierta medida la novatada de su entrada en las instituciones: equipos formados por gente con muchas ganas e ilusión pero que, después, han tenido en algunos casos un rendimiento irregular por distintas causas. O los encargados de ciertas responsabilidades no se han terminado de adaptar a la actividad política, o se han desilusionado con el partido y lo han abandonado o simplemente, no tenían las aptitudes esperadas para el trabajo requerido.
Poniendo el ejemplo de la formación morada, directamente la mitad de sus diputados no participan en las primarias para la reelección y una cifra similar puede darse en Ciudadanos, que ya perdieron a cuatro diputados en esta legislatura al decidir dejar el partido y pasar al Grupo de No Adscritos.
Así, es evidente que Cs va a necesitar refuerzos tanto en la composición de sus equipos dentro del partido de cara a la campaña como para las propias instituciones. En este punto, dirigentes consultados por este diario subrayan que tienen la directriz del propio Rivera de explorar posibilidades fuera de las fronteras del partido para reforzar y enriquecer las candidaturas. O lo que es lo mismo, seguir el ejemplo de Andalucía donde Ciudadanos ha fichado independientes como el politólogo Fran Carrillo o el ex seleccionador nacional de baloncesto Javier Imbroda para sus listas.
En este sentido, cabe recordar que la formación naranja recoge en sus estatutos que deben celebrarse primarias para los cabezas de lista a las alcaldías con más de 400 afiliados así como para las presidencias autonómicas y las distintas circunscripciones provinciales con un mínimo del citado número de militantes.
Para el resto de las listas electorales, los correspondientes comités autonómicos elevarán un informe al Comité Ejecutivo, que decidirá de manera definitiva. Es decir, las candidaturas se conformarán -excepto en el primer puesto- a través de consensos dentro de la dirección del partido. Un modelo que también sigue con matices, por ejemplo, el PSOE en este caso.
El fichaje de independientes tiene la cortapisa cuando se refiere a la concurrencia para un proceso de primarias, dado que se exige una antigüedad mínima en el partido de al menos 9 meses en el momento de la convocatoria del proceso. No obstante, como también ocurre en otros partidos, aquí se produce la posibilidad de -palabra mágica- excepción vía el Consejo General, que puede dar luz verde igualmente por mayoría absoluta de sus miembros. De hecho, esto ya ocurrió en su día con el ahora con el concejal y portavoz en el Ayuntamiento de València, Fernando Giner, quien fue autorizado para ser candidato pese a no llevar los 6 meses en aquel momento requeridos para liderar la lista.
En esta línea de incorporaciones, tal y como informó ABC, uno de los nombres que viene sonando con fuerza en las últimas semanas para sumarse a la candidatura de la capital es el de la fallera mayor saliente -acaba de ceder el testigo- Rocío Gil. Curiosamente, aunque esta joven de 27 años licenciada en Derecho participa en el espíritu de buscar cantera en la sociedad civil valenciana, no sería independiente dado que se afilió a Ciudadanos varios años atrás.
Una posibilidad, la de incorporar a Gil, que ven con buenos ojos varios referentes del partido aunque rechazan confirmar el fichaje dado que, tal y como publicó este diario semanas atrás, existe orden del propio Albert Rivera de no hablar de listas hasta que se concreten los calendarios de primarias en enero del próximo año.
