VALÈNCIA. (EFE). Un reglamento de convivencia, diálogo y consenso, evitar politizar la fiesta y que el Ayuntamiento ejerza de mero acompañante y permita una gestión independiente son algunas de las propuestas de los partidos de València ante los conflictos de convivencia y el aumento de la suciedad que se generan en Fallas.
Cerca de un millón de valencianos y turistas visitan València los cinco días grandes de estas fiestas Patrimonio de la Humanidad, lo que incrementa los problemas de seguridad y falta de limpieza, a los que se unen los conflictos entre falleros y vecinos generados por verbenas y botellones hasta altas horas de la madrugada.
La gestión de la fiesta se ha convertido en un arma política entre el actual equipo de gobierno, que defiende su "esfuerzo" por ofrecer más seguridad y mejorar la limpieza y la recogida de residuos, y la oposición, PP y Ciudadanos, que reclama mejor gestión, rigurosidad al hacer cumplir la normativa y más diálogo y consenso con el mundo fallero.
El candidato de Compromís a la reelección como alcalde, Joan Ribó, defiende en declaraciones a EFE que han incrementado aspectos de seguridad y limpieza y que el bando fallero "ya no se hace como el 'ordeno y mando' de antes, sino dialogando y debatiendo".
"Se ha avanzado en muchos aspectos de conflicto", defiende aunque apunta que junto al bando, otro elemento "fundamental" sería el nuevo reglamento de convivencia, que coordinan desde Policía Local, pero que no ha visto la luz esta legislatura.
Resalta que la ciudad está "muy saturada de gente" en Fallas pero que ha se aumentado la seguridad y la limpieza, y destaca que quieren impulsar una bajada del consumo de latas y envases "que acaban en el suelo".
La cabeza de lista del PSPV-PSOE, Sandra Gómez, declara a EFE que "no ha sido casualidad" que en puertas de unas elecciones haya habido "voces interesadas en magnificar" problemas que "siempre ocurren en todas las Fallas".
"Es verdad que hay problemas de convivencia y suciedad y esta ciudad tiene margen de mejora, pero la mejor receta es aplicar el diálogo y menos confrontación", defiende para reprochar que en los últimos años algunos representantes políticos hayan buscado "la confrontación directa con los falleros".
A su juicio, hay que mejorar "el diálogo y el consenso" como la "única forma de llegar a soluciones"; por eso, si es alcaldesa, propondrá una mesa con todas las comisiones falleras del centro histórico, las que tienen más afluencia, "para llegar a acuerdos que solucionen esos problemas".
La candidata popular, María José Catalá, discrepa "absolutamente" de la politización de la fiesta que, a su juicio, hace el actual gobierno por "practicar una injerencia excesiva en el mundo fallero" y apuesta por "una gestión independiente y respetuosa de acompañamiento del Ayuntamiento".
Señala a EFE que en estas Fallas, el consistorio "ha fallado" en seguridad, recogida de residuos y concesión de autorizaciones en el domino público, especialmente cerca de monumentos históricos.
"Es un absoluto despropósito no proteger los entornos históricos con especial valor patrimonial porque sabes que van a sufrir vandalismo si colocas determinadas actividades en su entorno", critica, mientras reprocha la "poca sensibilidad" con el comercio y la hostelería por autorizar negocios callejeros cerca de ellos.
Catalá apuesta por una "gestión profesional e independiente" de las Fallas, alineada con la voluntad de los falleros, incrementar las ayudas y una "mejor" gestión y planificación de los servicios municipales, además de dar a conocer más a los ciudadanos el impacto económico de las Fallas y que entiendan que son "una oportunidad".
El candidato de Ciudadanos, Fernando Giner, insta a "hacer cumplir el bando y la normativa, planificar y dialogar" para evitar estos problemas y señala a EFE que la figura del Ayuntamiento y del concejal de fiestas "tiene que ser como un árbitro en un partido de fútbol: cuanto menos se sepa quién es, mejor".
Para el candidato de Vox, José Gosálbez, al "fundamental" mundo fallero hay que "darle unas normas, como una ley marco y que ello se muevan dentro y hagan lo que tengan que hacer, dejarles cierta libertad pero siempre con respeto a los demás".