VALÈNCIA. El Complejo Educativo de Cheste y sus Centros de Residencias han logrado superar las dificultades ocasionadas por la Dana del pasado 29 de octubre. Aunque los daños estructurales fueron menores, sí se han detectado desperfectos como goteras, humedades y problemas eléctricos que afectaron parcialmente a las instalaciones. Tras unas semanas de parón, las clases presenciales se han reanudado este miércoles 20 de noviembre, y las residencias estarán listas para acoger a los estudiantes a partir de la semana del 25 de noviembre.
"La situación, aunque desafiante, no comprometió la estabilidad del complejo. Hemos trabajado con rapidez para garantizar que todo esté en las mejores condiciones, tanto para las clases como para la vuelta a las residencias", explica Esther Sancho, gerente del complejo, en declaraciones a Valencia Plaza. A pesar de que la Dana agravó algunas goteras ya existentes en las cubiertas y causó la entrada de agua en la planta baja de los edificios, los daños han sido considerados menores.
"El edificio está bien construido y los problemas que surgieron se han abordado con eficacia. Nuestra principal preocupación fue el camino perimetral cercano al Barranco del Poyo, pero ya se están realizando informes técnicos para solucionarlo", señala Sancho. Los cortes eléctricos iniciales también generaron inconvenientes, aunque no afectaron al suministro de manera prolongada. "En todo momento, priorizamos la seguridad del alumnado. Durante el temporal, los estudiantes permanecieron en el complejo hasta que pudimos organizar su regreso seguro con sus familias", añade la gerente.
Respecto a la intervención de las administraciones en la emergencia, la Conselleria de Educación y la Dirección General de Infraestructuras se movilizaron rápidamente para evaluar los daños y coordinar las reparaciones. "Nos hemos sentido muy respaldados por las autoridades. La Unidad Técnica de Educación se desplazó hasta aquí para realizar las inspecciones necesarias y garantizar que podíamos retomar la actividad con total seguridad", asegura Sancho a este diario.
El miércoles 20 de noviembre se retomaron las clases presenciales tras semanas de modalidad online, y la próxima semana los estudiantes podrán alojarse de nuevo en las residencias. "Todo está preparado para que el alumnado vuelva a la normalidad, con condiciones óptimas para su bienestar y aprendizaje", indica Sancho, al mismo tiempo que destaca que el complejo ha seguido las directrices de la Conselleria de Sanidad para garantizar un entorno seguro.
Si bien los daños más importantes se han reparado, algunas soluciones, como los contratos de emergencia para los trabajos de reconstrucción en el camino perimetral, aún están pendientes. Sin embargo, las autoridades aseguran que ya se han iniciado los procesos administrativos para contratar las obras necesarias. "Lo importante es que hemos superado lo más complicado, y ahora trabajaremos para completar estas tareas sin afectar la actividad académica ni la convivencia en las residencias", afirma Sancho.
Asimismo, el Complejo Educativo de Cheste ha reforzado los canales de comunicación con las familias y el alumnado, informando puntualmente sobre cada avance. "La respuesta de la comunidad educativa ha sido ejemplar; todos han mostrado una gran comprensión y paciencia", señala la gerente. Este esfuerzo conjunto ha permitido que, a pesar de las adversidades, el centro se mantenga enfocado en ofrecer un entorno educativo de calidad y en condiciones seguras.