Foto KIKE TABERNERRecuerda a los socialistas que la reversión de servicios sanitarios privatizados es un acuerdo del Botànic y que no se limita a hospitales
VALÈNCIA. Tras meses tratando (sin éxito) de llevar al PSPV al debate sobre qué hacer con el externalizado servicio de transporte sanitario, cuyo contrato acaba de forma inminente, Compromís ha decidido dar un paso más en la presión sobre sus socios y ha registrado una pregunta para que, de forma oral, la consellera Ana Barceló cuente en Les Corts sus planes sobre la cuestión.
Para Compromís, de hecho, el debate entre los socios debería ser sobre cómo revertir esa situación y que vuelva a la gestión pública para dar un mejor servicio sin que suponga un perjuicio económico para la Generalitat y entienden que, según lo firmado en los acuerdos de gobierno, así debería ser también para los socialistas.
"Estamos abiertos a estudiar las diferentes alternativas pero debemos recordar que en el Botànic estamos sujetos a un pacto de gobierno que establece la reversión pública de los servicios sanitarios privatizados una vez caducan las concesiones y esa es la circunstancia que para Compromís debería producirse con el transporte sanitario”, apunta el diputado Carles Esteve.
La reversión seguiría el camino que inició hace unos años Baleares, que Navarra tiene pensado implantar en 2022 y que Cataluña y La Rioja también se plantean.
La fórmula de la pregunta entre socios en Les Corts es una de las últimas medidas de presión pero no es la primera vez que se usa. Tanto Compromís como Unides Podem EU la plantearon con el tema de la reversión del Hospital de Torrevieja pero finalmente y tras negociaciones internas sólo el partido morado obligó a 'retratarse' a Barceló.
A la espera de lo que conteste, lo cierto es que los planes de Barceló parecen claros. En otoño salió el anuncio de licitación de un servicio cuyo siguiente contrato podría rondar los 380 millones de euros. El actual ascendió a 226 millones por cuatro años y lo desarrolla UTE Ambulancias Ayuda SLU, liderada por la alicantina ASV, y en la que también participan Transvia, Ambulancias Autónomas SL, Ambulancias Edetanas SL, Ambulevante SL y Alquiler Car Luxe SL. Según CCOO, partidaria de la reversión, suman cerca de 1.200 trabajadores.
El diputado de Compromís aseguró que el servicio "está dejando mucho que desear, con una carencia de medios y recursos humanos y una cobertura y asistencia muy mejorable”.
