Foto: EFEVALÈNCIA. El Ayuntamiento de València se pone el juego el próximo 28 de mayo con dos bloques bien diferenciados y tres aspirantes a la Alcaldía con posibilidades: en el grupo de formaciones de izquierdas, el actual primer edil, Joan Ribó (Compromís), y la candidata socialista, Sandra Gómez (PSPV-PSOE), luchan por mantener una suma mayoritaria pero también por ostentar la vara de mando en el Cap i Casal. En la otra orilla, la cabeza de lista del PP, María José Catalá, pelea por ser la nueva alcaldesa de València.
Aunque los sondeos señalan una igualada pugna, resulta inevitable que desde las distintas fuerzas políticas se especule con qué pasará según las mayorías que determinen los ciudadanos. O lo que es lo mismo, cómo podría ser el futuro gobierno municipal que salga de las urnas el próximo 28M.
En este sentido, si el bloque de izquierdas repite victoria como viene ocurriendo desde 2015, se avecinan cambios competenciales en el consistorio. En las últimas semanas, la candidata socialista ha mostrado su intención de liderar áreas que hasta ahora han sido gestionadas por Compromís. De hecho, la líder del PSPV en la ciudad ha incorporado en su lista personas que tienen la misión de, si se gobierna, ostentar unas determinadas áreas en concreto.
Así, dos han sido los fichajes más claros de la dirigente socialista en este aspecto: por un lado, la secretaria autonómica de Transporte, María Pérez, ha sido incorporada en un puesto de salida a la lista de Gómez con el objetivo de que sea la próxima concejal de Movilidad; un área gestionada hasta ahora por Compromís, en particular por Giuseppe Grezzi, un edil que ha acometido importantes cambios en la ciudad, especialmente en lo referido al carril bici, pero que también ha recibido fuertes críticas por su gestión, por ejemplo, en la EMT.
Otra de las áreas sobre las que Gómez ha fijado el punto de mira es la concejalía de Cultura Festiva, que ha estado en manos de Compromís los últimos ocho años. Para ello, ha sumado en su candidatura a la periodista y ex fallera mayor infantil Nuria Llopis.
Esta hoja de ruta de Gómez, obviamente, estaría dirigida a una victoria sobre Compromís- y una mayoría en el bloque de izquierdas-que permita a la candidata socialista tener la iniciativa respecto a las áreas a escoger en el futuro gobierno municipal. De lo contrario, a priori sería difícil que la representante del PSPV pudiera gestionar unos departamentos que hasta ahora han sido liderados por Compromís.
Sin embargo, estos cambios de concejalías podrían producirse incluso aunque la candidata socialista no fuera capaz de superar a Compromís el próximo 28M. Así lo afirmó este miércoles el propio alcalde de València y candidato de la coalición, Joan Ribó, durante un encuentro organizado por este diario.
Así, el primer edil se mostró abierto a posibles intercambios de áreas de gestión en la ciudad con la formación socialista después de ocho años. "Estoy abierto a cambios. No me gusta la idea de que los regidores, después de mucho tiempo en un área, puedan considerar suyas las concejalías o de que se generen reinos de taifas", explicó el alcalde.
En esta línea, preguntado por Valencia Plaza sobre si cedería el área de Movilidad o de Cultura Festiva, dos de los departamentos que ha gestionado Compromís en este tiempo, no descartó la posibilidad. "Estoy abierto a hablar y negociar cambios si volvemos a tener la mayoría", admitió.
Unas palabras que coinciden con otras manifestaciones públicas de concejales de su formación, como por ejemplo Pere Fuset, edil de Cultura Festiva, quien especuló semanas atrás con la posibilidad de que Compromís gestionara el área de Protección Ciudadana (Policía y Bomberos) o Urbanismo, cuando se conoció la apuesta de Gómez por Llopis como futura edil de Fiestas. En este sentido, cabe recordar que los socialistas han gestionado esta legislatura áreas tan relevantes como Urbanismo o Hacienda, lo que indicaría que también podrían entrar en una negociación futura.
