Compromís y Unides Podem se citan para revertir las ambulancias en un hipotético tercer Botànic

VALÈNCIA. Tras meses de tira y afloja entre los socios del Botànic y un último intento de Compromís y de Unides Podem EU  por frenarlo hace una semana, el pleno del Consell aprobó este viernes el nuevo 'supercontrato' de transporte hospitalario urgente y no urgente. La consellera socialista Ana Barceló sacó así adelante un proyecto cuyo precio de salida es 372,79 millones para los próximos cuatro años, con posibilidad de dos más de prórroga. En total, se podrían rozar los seiscientos millones de euros de contrato.

Desde los socios minoritarios del Botànic se invocó al pacto de gobierno para revertir el servicio, como se ha hecho con los hospitales, pero desde el lado de los socialistas tras meses negando el debate se estableció que ahora ya era tarde y que se podía poner en peligro el servicio de iniciar ahora el proceso.

Este viernes, la vicepresidenta Mónica Oltra dio por asumido ese argumento... pero avanzó que no renucian a retomar esa batalla. Eso sí, eso pasaría porque puedan poner en marcha un tercer Botànic en 2023 y porque Compromís y Unides Podem EU puedan 'convencer' al PSPV, que se ha mostrado contrario a la reversión aunque alegando motivos prácticos.

"Hay un refrán en español que dice que ‘quien mucho abarcar poco aprieta’. Acabamos de hacer la reversión de Torrevieja, y las de Dénia y Manises están a las puertas. Son procesos muy complejos, con muchos pasos que dar, no se puede todo a la vez. Eso no quiere decir que se renuncie en un futuro. Pero lo que se debe gestionar desde lo publico debe estar bien hecho el traspaso", afirmó

El nuevo contrato y los trabajadores

El contrato de 2016 salió a licitación por 257 millones pero finalmente se adjudicó por 236. Según indicó Barceló hace unos días en Les Corts la nueva licitación supondrá el aumentó en 61 de las ambulancias convencionales y en siete las de Soporte Vital Básico. Pero, además, apuntó que permitirá la ampliación de horario de seis unidades de ese SVS y de siete del Soporte Vital Avanzado (SAMU) y que se mejorarán las condiciones de los trabajadores.

En este sentido, Oltra, que reconoció que buena parte de la reivindicación de la reversión partía de ellos, subrayó que "el nuevo contrato tiene en cuenta todas las reivindicaciones laborales, por eso el aumento del precio de las contratación ha de ir en un 70% a mejorar las condiciones de los trabajadores".

"Se avanza en la mejora aunque eso no implica una renuncia a que sea un servicio de gestión directa por parte de la administración", afirmó.

Acelerar La Marina

Pero, al mismo tiempo que el Consell aprobaba la licitación del contrato, desde Compromís presentaban una PNL en Les Corts para que Sanidad "inicie de manera inmediata el proceso para revertir la privatización del Hospital de Dénia y su departamento de salud" de La Marina.

La inicitiva, que su síndica Papi Robles y los diputados Carles Esteve y Josep Nadal, presentaron al comité de empresa del hospital la petición alegangando "el obstruccionismo" que han mostrado las concesionarias de los ya revertidos departamentos de Alzira y Torrevieja.

"Vemos que un año no es suficiente margen para hacer una reversión. Es urgente que la Conselleria inicie ya el proceso comunicando su intención de finalizar el contrato a principios de 2024. Así Sanidad tendrá un año y medio para desarrollar el proceso de reversión con más margen, más previsión y más garantías", señaló Esteve.