Operarios retiran un féretro del depósito de cadáveres del Hospital General de València. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. La Comunitat Valenciana ya es la primera autonomía que registra en la tercera ola datos diarios de mortalidad por covid peores a los de cualquier otro momento de la pandemia, superando incluso al pico de fallecimientos que se reportó a comienzos del mes de abril. De este modo, y mientras que en los instantes más letales de la primera ola se alcanzó una media semanal de 50 muertes diarias, en la segunda quincena de enero la cifra ha crecido, por ahora, hasta los 53 casos de media.
Así se recoge en los datos de mortalidad que Sanidad actualiza periódicamente con la información de las comunidades autónomas, en un proceso por el que cada región traslada al Ministerio los decesos uno a uno según la fecha de defunción. Por este motivo, Sanidad reconoce que la información puede “sufrir retrasos” y considera sus cifras “provisionales”. Todo ello implica que los datos, y en especial los referidos a las fechas más recientes, podrían ser todavía mayores a los ahora reflejados. Por ejemplo, el pasado jueves se asignaban a la Comunitat Valenciana 52 defunciones para el 16 de enero, pero solo un día más tarde esa cifra ya había aumentado hasta las 60 muertes.
Aún a falta de incorporar la totalidad de las defunciones, la media semanal de los últimos días ya evidencia que la tercera ola está generando en la Comunitat un pico de fallecimientos mayor que el de las dos oleadas anteriores. Es un escenario al que se llega tras casi un mes de aumento sostenido en las cifras de mortalidad, cuya tendencia cambió al alza antes de las fiestas navideñas. De hecho, en los días previos a la Navidad ya comienza a dibujarse una línea ascendente que se mantiene hasta ahora.
Esta situación se acentúa sobre todo en la provincia de Valencia, donde se ha superado con creces el récord de defunciones diarias por coronavirus de los peores momentos de la pandemia, que hasta entonces se ubicaba entre los últimos días de marzo y los primeros de abril de 2020, con 23 decesos de media. Ahora, la cifra ha llegado a ubicarse en las 31 muertes diarias.
Por el contrario, los datos de las provincias de Alicante y Castellón no reflejan, de momento, que se hayan batido los máximos registros la primera ola, aunque su situación ha empeorado considerablemente y podría acentuarse conforme se añadan nuevos datos a la serie del Ministerio. En el caso de Alicante, el pico de la pandemia todavía se sitúa a comienzos de marzo, cuando se registró una media semanal de 21 decesos diarios.
Mientras, en la provincia de Castellón, donde la cifra de muertes ha sido mucho menor desde el estallido de la crisis de la covid-19, el dato medio más elevado se encuentra también en la primera ola con siete fallecimientos diarios. Por ahora, el mayor registro medio reportado durante la tercera ola es de cinco muertes diarias.
Algo que de nuevo podría cambiar conforme se actualicen los datos, ya que la diferencia entre el total de fallecidos que comunica la Conselleria de Sanidad y las defunciones procesadas en la serie del Ministerio ha crecido con cada nueva notificación. Así, y mientras que el 14 de enero la Conselleria había informado de 76 decesos más que los clasificados por el Ministerio, el viernes pasado el decalaje ascendía a 150 casos.
Los datos del Ministerio evidencian que la Comunitat Valenciana es la única región donde, por ahora, las cifras oficiales de mortalidad de la tercera ola superan a las que se registraron en las dos anteriores. No obstante, existen otras comunidades en las que la tendencia es claramente al alza, como Murcia, que avanza hacia sus peores registros del mes de noviembre.
También en otras comunidades autónomas, como Extremadura o Galicia, la evolución de los fallecimientos dibuja una línea ascendente, mientras que en regiones como Castilla y León o Asturias todavía se encuentra en niveles muy alejados a su pico. Aun así, para conocer de la manera más certera posible la mortalidad del coronavirus en cada una de las olas, habrá que esperar a las estimaciones del Instituto Nacional de Estadística (INE) y su desglose por causas de mortalidad.
Por otro lado, y ante el imparable avance de los indicadores de la pandemia en territorio valenciano, el president de la Generalitat, Ximo Puig, anunció este domingo nuevas restricciones en la Comunitat. Así, desde la publicación de las medidas este lunes en el DOGV, las ciudades de más de 50.000 habitantes quedan cerradas perimetralmente durante los fines de semana y los días festivos.
Además, las reuniones que se produzcan dentro de los domicilios quedan limitadas al núcleo de convivencia, mientras que en los espacios públicos al aire libre o cerrados los encuentros se restringen a un máximo de dos personas salvo que sean convivientes. El titular del Consell matizó, no obstante, que se permitirá superar los límites fijados si estas reuniones son de ámbito laboral o institucional, actividades relacionadas con el ámbito educativo o necesarias para el cuidados a personas vulnerables.
El propio Puig reconocía este domingo que la última semana ha sido "la peor que ha vivido la Comunitat desde el inicio de la pandemia", y que por ello las medidas van destinadas a que se produzcan "las menores relaciones sociales posibles". Además de estas nuevas restricciones, toda la autonomía valenciana tiene cerrada las hostelería y limitada la apertura del comercio hasta las 18.00 horas.
El Consell cierra perimetralmente las ciudades de más de 50.000 habitantes los fines de semana y festivos
