La victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses abre una nueva etapa bursátil, según Víctor Alvargonzález, director de estrategia de Nextep Finance.
El experto sostiene que el regreso del republicano al poder podría generar un cambio “significativo”, despertando los ‘animal spirits’, término que utilizaba Keynes para describir la capacidad humana de innovar y crear riqueza.
"Lo que estamos viendo es un regreso al dinamismo, pero también a los excesos que caracterizaron los años 80”. La liberación del espíritu empresarial y la apuesta por una economía menos regulada pueden impulsar los mercados en el corto plazo, pero también elevarán la volatilidad y el riesgo de desequilibrios a largo plazo, explica Alvargonzález.
El director de estrategia de Nextep señala que en la situación actual de Estados Unidos se pueden encontrar ciertos paralelismos con el entorno sociopolítico que se vivieron en las presidencias de Ronald Reagan y Margaret Thatcher. En aquel momento, las políticas orientadas a reducir la intervención estatal y fomentar el individualismo económico desataron un auge bursátil sin precedentes.
“Reagan forzó a las grandes economías como Japón a fabricar sus coches en Estados Unidos, fortaleció la industria nacional y restauró el orgullo geopolítico de EE.UU. Trump parece querer ir en esa misma dirección”, añade Alvargonzález.
No obstante, si bien las medidas tomadas por Reagan y Thatcher inicialmente revitalizaron las economías deprimidas de aquellos años, también dejaron tras de sí riesgos significativos: la desigualdad social aumentó y los mercados financieros sufrieron una burbuja que culminó en el crash de 1987.
Según Alvargonzález, este tipo de escenarios podría repetirse. “La historia no se repite, pero rima. Lo que ocurre en el plano sociológico tiende a reflejarse en la economía, y esto puede derivar tanto en periodos de bonanza como en episodios de corrección brusca”, destaca. “Trump traerá oportunidad, pero también volatilidad”. Las carteras de inversión deben estar preparadas para navegar en aguas turbulentas”.
Un actor que podría jugar un papel clave en la transformación económica de los Estados Unidos bajo el mandato de Trump es Elon Musk. Reconocido por su capacidad para romper barreras en industrias como la automoción, espacial y tecnológica. Sin embargo, Alvargonzález se muestra cauteloso: “No es lo mismo limitar gastos y agilizar una empresa en la que tú eres el director y tomas todas las decisiones, que hacerlo en una estructura gubernamental compleja”.
Aun así, reconoce que Musk tiene un historial de superar desafíos significativos: “Es cierto que casi todo lo que se ha propuesto lo ha conseguido, y los retos que ha asumido no han sido menores”.
No obstante, el éxito dependerá de su habilidad para traducir su experiencia empresarial a un escenario tan diferente como es el de la administración pública.
Para los inversores, la clave estará en la capacidad de adaptarse a un escenario con mayor volatilidad. Dice Alvargonzález que esto no es necesariamente es negativo: “La volatilidad crea oportunidades para quienes están bien asesorados y saben cómo aprovecharlas. A diferencia de los años 80, hoy cualquier inversor tiene acceso a carteras de fondos de inversión que invierten en diferentes sectores y activos y sectores e incluso en posiciones cortas, que pueden proteger su cartera y capitalizar los movimientos del mercado, ya sean al alza o a la baja”, asegura.
“Lo importante en un escenario como este”, comenta para añadir: “no es sólo participar en los mercados en auge, sino saber prepararse para los ciclos de corrección”.