Los trabajos también consisten en inspeccionar en altura las ramas principales (cimales) por si existen cavidades, heridas, fisuras, chancros o tumores y proceder a su saneamiento y a la poda de las que presenten riesgo de caída. También se descargarán de peso para evitar posibles fracturas y caída de ramas, según ha detallado el consistorio en un comunicado.
La poda se ha realizado los días 19 y 20 de agosto y los trabajos se han llevado a cabo entre las 08.00 y las 11.00 horas de la mañana, por tratarse de la franja de tiempo en que circula menor número de vehículos.
El concejal de Parques y Jardines, Juanma Badenas, ha apuntado que la poda se realiza en el mes de agosto en coordinación con la Sala de Control de Tráfico y con el Servicio de Policía Local, "en aras de evitar posibles atascos y garantizar la necesaria fluidez de la circulación, ya que los trabajos de poda requieren el corte de un carril de la calzada, por lo que es necesario coordinar las actuaciones".
En esta línea, ha destacado que la poda "es necesaria por el gálibo del ficus, para que no entorpezca el paso de vehículos altos como son los autobuses y camiones". "Por eso, cada dos años aproximadamente, es necesaria su poda, cuando molesta al paso por la calzada", ha incidido el edil, que ha resaltado que se trata de una intervención "muy respetuosa, se mantiene el porte natural del árbol y se revisan las ramas también por razones de seguridad".