Algo se está haciendo mal cuando se tienen dudas de las decisiones de jueces y fiscales. Hace falta pedagogía y claridad en las explicaciones jurídicas porque la alarma social se puede abrir camino entre los ciudadanos. La confianza enlas decisiones judiciales es fundamental para creer en nuestro sistema democrático
En los últimos años hemos vivido en una suerte de destape de asuntos de corrupción que han afectado a importantes y destacados resortes del poder. Hemos visto, vemos, a familiares del Rey, Presidentes Autonómicos, Ministros, Alcaldes, concejales, diputados, empresarios de éxito, banqueros, dirigentes sindicales, responsables de instituciones nacionales e internacionales, artistas,…en fin un rosario de corruptos, corruptores, imputados, procesados, juzgados, condenados y encarcelados. Una auténtica alarma social de la que hemos dado buena cuenta los medios de comunicación. En algunos casos destapando corruptelas y en otros contando la realidad de los hechos que se sucedían en los tribunales. Hemos reclamado ejemplaridad y justicia. En otras ocasiones podemos haber caído en el juicio mediático y demagógico. Lo mismo ha ocurrido con los distintos representantes políticos que en su pleno derecho y deber de representarnos han exigido responsabilidades aunque en otros momentos han caído en la trifulca y el insulto al adversario. Creo que en muchas circunstancias se ha confundido al ciudadano, dejando que la duda y la desconfianza en la justicia se instalen en su opinión. Es difícil, pero como siempre en el término medio y justo está el equilibrio. La labor de los medios informativos y los políticos es la de contar y denunciar la utilización fraudulenta de los recursos públicos. Se trata del dinero del ciudadano. Y a los ciudadanos nos debemos todos.
Creo en la Justicia y en quienes la aplican, en muchos casos con muchas dificultades para realizar su trabajo por falta de medios y también por presiones directas o indirectas. Otra cosa es la confusión y desconcierto que nos pueden generar o incluso generamos los medios o los propios jueces y fiscales con las decisiones. Se producen simultáneamente en muchas ocasiones y al mismo nivel de responsabilidad, varios debates. A saber, el moral por el comportamiento fraudulento y delictivo de los corruptos que por su posicionamiento deberían ser ejemplares; el cívico que afecta a los ciudadanos que no entienden las decisiones distintas o dispares o de “distinto rasero” según quién seas; y por último el debate penal y civil, es decir las medidas propiamente jurídicas. Ocurre que a iguales delitos o condenas las resoluciones son distintas, aunque sean instancias similares. Al final entre unos y otros tenemos la tentación de confundir el deseo con la realidad.
Ni se puede ni se debe demonizar a los funcionarios judiciales, ni a los medios. Unos imparten justicia y los otros lo cuentan, analizan y valoran. Muchas veces la locuacidad de los protagonistas de la información, revelan datos y situaciones que pueden ayudar a comprender mejor las decisiones técnicas. Hablar con propiedad y conocimiento es fundamental. Pero esa locuacidad puede ser contraproducente porque genera estados de opinión basados en hechos que no son verídicos.
Todas estas reflexiones vienen a cuenta de las últimas decisiones judiciales y políticas que han provocado en la opinión pública cierto desconcierto, por no decir desconfianza.
Nóos. Iñaki Urdangarín y la Infanta Cristina. No voy a entrar en disquisiciones jurídicas porque no soy experta. Y además aún habrá que esperar al Tribunal Supremo (más o menos 10 meses) si confirma las condenas a los afectados por el caso. Sí es verdad que la decisión de las magistradas de Palma de decretar libertad provisional para Urdangarin sin fianza y con la comparecencia obligatoria una vez al mes en Suiza, el país en el que reside, ha generado gran desconcierto. Si se compara con su socio, Diego Torres al que se le retira el pasaporte, se le prohíbe salir del país, se deduce la disparidad de criterios. Sorprende también que se han rechazado las medidas cautelares solicitadas por el fiscal que pedía fianza económica. Lo mismo ocurre con la sentencia que absuelve a la Infanta Cristina y que sólo la considera beneficiaria a titulo lucrativo por el que debe abonar una multa. En este caso la locuacidad de juez instructor, José Castro y el fiscal anticorrupción de Palma, Pedro Horrach tampoco ha ayudado mucho. Es legítimo que hablen, pero a veces se han pasado de frenada. Castro ha dicho ahora que se “reafirma” en su instrucción que observaba culpabilidad en la Infanta y Horrach, que ha concedido entrevistas hasta el lucero del alba, está incomodo por la resolución de las magistradas sobre las medidas cautelares. Dice que la decisión es correcta aunque no la comparte. Es cierto que el juicio reúne las características de excepcionalidad por las personas procesadas y condenadas y también por las que han resultado absueltas (rama valenciana). Cosas que se han dicho de Castro y Horrach: mala instrucción del juez que ha provocado la condena “amable” de los encausados o que la fiscalía se ha excedido en la petición de penas que generaron otras expectativas. Y en cuanto a las magistradas dos opiniones: han dictado una sentencia ajustada según unos, o amable, blanda y suave para otros. Con estos mimbres la polémica se ha instalado en la opinión pública una vez escuchada la opinión publicada periodística y política.
Incomodidad en la Monarquía y para Felipe VI. La Jefatura de Estado no consigue al menos de momento despegarse del asunto. Tiene poco margen de maniobra. Es cierto que la posición de la Casa Real y del Rey Felipe VI en particular ha sido meridianamente clara: “Respeto a la independencia del poder judicial”. Es más la separación real con su hermana y cuñado es palpable. No debemos olvidar que el caso fue la guinda que colmó el pastel y se produjo la abdicación del Rey Juan Carlos por una situación insostenible. La altanería, soberbia y pérdida del sentido del deber y la realidad de Cristina es palmaria. Debería renunciar a los derechos dinásticos, simplemente porque sería un gesto que dignificaría la institución. Dicho lo cual también hay que recordar que aunque ha resultado absuelta sí que deberá abonar una multa por ser beneficiaria a título lucrativo (a descontar de la fianza ya presentada). La sentencia es clara, Urdangarin se valió de su situación privilegiada por su pertenencia a la familia del Rey. En este punto no me resisto a comentar el criterio de la tontería, y que me perdonen los tontos. Estoy harta de los tontos que no sabían, no conocían lo que hacían y por supuesto de las tontas-florero que pasaban por allí y no se enteraban lo que pasaba(Ana Mato, Rosalía Iglesias-mujer de Luis Bárcenas-, ...) Firmaban como si tal cosa. Sólo un repaso de datos. En el interrogatorio ante el juez Cristina contestó así: no lo sé 189 veces, lo desconozco 58, no lo recuerdo 59 y 7 no me consta. Solo hacía lo que su marido le pedía. Alguien lo ha definido como el “juicio del amor”.
Tarjetas Black. En este caso la Audiencia Nacional casi ha adoptado al completo las peticiones de la Fiscalía. Condenas de prisión para todos los juzgados. Son 65 y todos condenados por apropiación indebida. La Audiencia considera probado que el uso fraudulenta de las tarjetas “opacas” no eran un complemento retributivo como se esforzaron en justificar los encausados. Entre los condenados, banqueros, políticos, dirigentes sindicales y empresarios. Miguel Blesa, ex Presidente de Caja Madrid tendrá que cumplir 6 años de prisión, el ex Vicepresidente del Gobierno y ex dirigente del FMI, y Presidente de BANKIA, el otrora todopoderoso, Rodrigo Rato 4 años y 6 meses. El representante de IU, Moral Santín, 4 años. El que fuera presidente de la patronal empresarial, Gerardo Díaz Ferran, dos años y medio Jefe de la Casa Real, Rafael Spottorno, 2 años . Y así hasta 65 condenados.
ERES de Andalucía. Y el azar ha querido que el juez que va a juzgar el mayor caso de presunta corrupción en Andalucía, sea Pedro Izquierdo, Presidente de la Audiencia de Sevilla, que en su día fue secretario general de Justicia en la Consejería de la Junta de la Comunidad, durante los gobiernos de Manuel Chaves, José Antonio Griñán y Susana Díaz. En este caso se juzga a los dos ex presidentes Chaves y Griñán. El juez Izquierdo ha pedido tranquilidad y ha anunciado que tomará la decisión que corresponda por si fuera necesario que se abstuviera por su cercanía a los imputados.
¿Purga judicial? Y para ahondar en el criterio de confianza de los ciudadanos en la justicia nos encontramos con los cambios que va a efectuar el Ministerio Fiscal en más de 30 puestos de fiscales. Digo confianza o desconfianza cómo se han aprestado a decir distintas asociaciones de fiscales, algunos fiscales y también PSOE, C´s y Podemos. La norma en el Ministerio Fiscal dice que cada 5 años se releva en los distintos puestos a los responsables. En esta ocasión la dependencia gubernamental y/o política, ha incurrido, a mi modo de ver en falta de oportunidad, sensibilidad y autonomía. Y si pensamos mal, como es tendencia natural, vemos entre otras cosas que se releva a fiscales que han hecho una gran labor en la investigación de asuntos de corrupción. Es el caso del responsable en Murcia, Manuel López Bernal, o el fiscal de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza que será sustituido por Jesús Alonso en los asuntos de terrorismo. El Fiscal General del Estado, José Manuel Maza, ha propuesto a Manuel Moix como Fiscal Anticorrupción. El fiscal de Murcia, ha sido muy duro y ha relatado las presiones y coacciones que han vivido los fiscales que investigan la corrupción. Incluso ha dicho que se les ha amenazado al más puro estilo de la mafia de los años 20. Para evitar todos estos dimes y diretes sobre decisiones técnicas o políticas y no quiero pensar que dirigidas o manipuladas urge la reforma del estatuto del Ministerio Fiscal.
El Tablero
El caso es que todos estos avatares jurídicos y judiciales van a acabar en el Parlamento. Tanto PSOE, Podemos y C´s han pedido la comparecencia inmediata del Fiscal General del Estado y otros fiscales para comprobar si hay indicaciones, sugerencias o mandatos sospechosos para dictar sentencias o realizar investigaciones de asuntos de corrupción. Y no sólo la vía parlamentaria, las redes sociales están que echan humo. En especial las de Podemos, IU, ERC,… que han intentado con su contundencia dirigir a la opinión pública y a los ciudadanos.
Las frases de la semana
Manuel López Bernal, Fiscal Superior TSJ de Murcia: “Al final se persigue más a los fiscales que a los corruptos” ¡Necesitamos confianza y seguridad!
Miguel Roca, constitucionalista y abogado de la Infanta tras la sentencia que la absuelve: “Estoy levitando”¡Objetivo cumplido!
José Castro, juez instructor de Nóos: “El tribunal ha dado por bueno que la Infanta era una mujer florero” ¡Dudas sobre su instrucción!
Pedro Horrach, fiscal de Nóos: “A la Infanta se la sentado en el banquillo por ser quién es” ¡Ha sido su abogado…!
Titular del Diario de Noticias de Navarra que se convirtió en viral: “Seis años de prisión para Urdangarín y absuelta por ignorante Cristina de Borbón” ¡Viva el periodismo!
Artur Mas: “No hemos hecho lo que hemos hecho para en el último momento tirar la toalla” ¡Camino sin retorno!
Eduardo Madina, diputadado PSOE: “Lo que nos pasa es culpa nuestra” ¡Pues tendrán que solucionarlo!
Patxi López, candidato PSOE a la secretaría general: “Un partido que enfrenta a unos militantes contra otros, irá al desastre” ¡Se diluye!
Emiliano García Page, Presidente de Castilla La Mancha sobre el programa de Pedro Sánchez: “Para gobernar España no puedes reinventarla, ni ponerla patas arriba para ganar cuatro votos” ¡Aviso a los militantes!
Pedro Sánchez, el “renacido” candidato: “Seguimos en el no es no” ¡Pertinaz!