VALÈNCIA. El Gobierno valenciano ha movido 39,8 millones de euros del presupuesto de la Conselleria de Sanidad para sufragar los contratos de emergencia adjudicados en el marco de la Dana que afectó a la provincia de valencia a finales de octubre. Así se desprende de dos resoluciones publicadas este lunes en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV).
Según expone el Consell, la catástrofe provocó daños en "numerosos centros sanitarios" de los departamentos de salud de La Fe, Manises, Doctor Peset, Requena, Hospital General, la Ribera y Arnau de Vilanova. Una situación que hace que sea "necesario" disponer de crédito de cara a cubrir los contratos de emergencia destinados a la reparación de los desperfectos ocasionados por el temporal.
En este sentido, se ha llevado a cabo una minoración de crédito en el presupuesto de 2024 de algunos programas del departamento que dirige Marciano Gómez. No obstante, el dinero que se transfiere "no está vinculado a compromisos pendientes ni afecto a financiación condicionada". "La modificación propuesta no tiene incidencia alguna en el cumplimiento de los objetivos del programa", señala en Ejecutivo autonómico en ambas resoluciones.
Por un lado, se produce una ampliación de 29,8 millones de euros en el presupuesto destinado a la compra de bienes y gastos de funcionamiento en Atención Primaria. Para ello, se minora el crédito destinado a inversiones reales en seis ámbitos: Atención Primaria; Atención Hospitalaria; salud Mental y atención sanitaria de media y larga estancia; Escuela Valenciana de Estudios para la Salud; y centros de salud pública.
Por otro, se añaden otros 10 millones de euros para la compra de bienes y gastos de funcionamiento en Atención Primaria. En este caso, se reduce el presupuesto dedicado a los gastos financieros de los servicios generales de la Secretaría Autonómica de Sanidad.
Lo cierto es que la riada que provocó el paso de la Dana por la provincia de Valencia causó importantes desperfectos en decenas de centros de salud, la mayoría de los cuales ya han sido reabiertos al público. En un principio, la Generalitat cifró en 108 millones de euros las actuaciones previstas para la puesta a punto de estos espacios. Los centros de Catarroja, Aldaia, Paiporta, Picanya y Alaquàs fueron los más afectados y se prevé que las obras para su puesta a punto no terminen hasta mayo del próximo año.
Además, algunos de los centros operativos lo están de manera parcial mientras se rehabilitan las zonas más damnificadas del edificio, tal y como apuntaba la Conselleria de Sanidad en el balance realizado un mes después de la catástrofe. Entre las actuaciones que se están llevando a cabo para recuperar la normalidad de estas instalaciones se encuentran desde tareas de albañilería hasta reparaciones de los sistemas eléctricos, pasando por la reposición de mobiliario y demás equipamiento.