Cultura desbloquea el Plan del Cabanyal (con condiciones) 

VALÈNCIA. La Conselleria de Cultura ha dado finalmente el visto bueno al Plan Especial del Cabanyal-Canyamelar (PECC) que llevaba meses en estudio por el departamento autonómico. La Dirección General de Cultura y Patrimonio de la Generalitat ha emitido un informe favorable sobre el nuevo plan urbanístico de la fachada marítima, lo que permitirá avanzar en la tramitación del mismo desde la concejalía de Urbanismo.

Así, el escrito firmado por la directora general, Carmen Amoraga, informa favorablemente sobre el PECC pero "con sujeción a condiciones y modificaciones de índole arquitectónica y arqueológica" que deberán cumplirse antes de su aprobación definitiva, apostilla en ese sentido.

Por ejemplo, el Ayuntamiento tendrá que justificar el cambio de régimen de protección que se aplica a algunos inmuebles. "Se han incluido en el catálogo numerosas viviendas que no estaban anteriormente protegidas", reza el documento en este sentido, y por otro lado se ha rebajado la protección material de otras viviendas, todo ello con falta de justificación a ojos de la administración autonómica.

Amoraga también exige que se deje claro y de manera expresa que los propietarios de los inmuebles que formen parte del patrimonio cultural valenciano están obligados a conservarlos y a mantener la integridad de su valor cultura. A lo que se añade la necesidad de puntualización de los elementos concretos de determinados edificios que quedarán protegidos con el plan.

Otro de los aspectos que deberá corregir la concejalía de Urbanismo tiene que ver con la condición de las licencias de derribo a la presentación de un proyecto sustitutorio. Algo que el Plan solo explicita para los edificios catalogados y que Cultura exige que se amplía a "cualquier edificación" del núcleo histórico "independientemente de que tenga o no una protección individualizada".

Se deberá prohibir claramente que las placas solares que se instalen en el núcleo histórico no deben ser visibles desde la vía pública; se deberá completar las informaciones recogidas en las fichas de los Bienes de Relevancia Local y se habrá de añadir información a los planos que ahora mismo no hay, entre otras múltiples exigencias de la Dirección General.

La edil de Urbanismo, Sandra Gómez, calificó el visto bueno como "una muy buena noticia" porque supone “un avance muy importante de cara a aprobar el Plan Urbanístico del Cabanyal". Según la edil,  el plan "va permitir dar seguridad jurídica y un empujón a la rehabilitación y consolidación del barrio".

El documento, una vez obtenido el visto bueno de Patrimonio, se someterá a exposición pública durante 20 días para que los afectados puedan presentar alegaciones. Una vez que se incorporen algunos condicionantes solicitados por Patrimonio en su informe, se prevé que el Plan Especial, ya en su recta final, se apruebe provisionalmente a principios del año que viene. Una vez respondidas las alegaciones a principios de 2023, el Plan será remitido a la Comisión Territorial de Urbanismo para su aprobación definitiva y su entrada en vigor.

El Plan proyecta la creación de tres vías verdes, el ajardinamiento del final de la avenida Blasco Ibáñez, la limitación al 10% de los apartamentos turísticos por manzana, la protección de la fachada marítima y el mantenimiento de la tipología edificatoria del barrio.

Por otro lado, las nuevas viviendas se limitarán a un máximo de tres alturas y de dos en la zona de especial protección, manteniendo la tipología constructiva, las fachadas, las alturas, los patios y los elementos ornamentales. Una vez se aplique el plan, el barrio dispondrá de más de 60.000 nuevos metros cuadrados de zonas verdes y peatonales y más de 40.000 nuevos metros cuadrados de equipamientos públicos. El Plan Especial prevé entre otras cosas la creación de aparcamientos en altura, la apertura de comercios distintos a la restauración en los locales de la avenida de Neptuno y la peatonalización de esta avenida.