VALENCIA. Según la biografía oficial, el 16 de agosto de 1977 Elvis Presley murió. Las primeras autopsias hablaban de un cocktail de 14 tipos de drogas distintas que le habían causado un choque anafiláctico. Años más tarde, en 1994, el doctor Joseph Davis desmintió la teoría y aseguró que fue un ataque cardíaco mientras plantaba un pino en el cuarto de baño de su casa. Pero la pregunta es ¿de verdad murió o simplemente fingió su muerte?
1- La cita con Nixon: Para entender bien el embrollo hay que fijarse en una fecha: 21 de diciembre de 1970. A las 12.30, Elvis se planta en el despacho oval para hacerle entrega a Nixon de un Colt con balas de plata y se ofrece como agente secreto para luchar contra el crimen en el mundo de la música. Los hippies, los panteras negras, Vietnam, la drogaina.... EEUU tiene un problema y Elvis puede ser la solución. Oficialmente, todo acabó en una simple reunión protocolaria. Así lo mostró Allan Arkush en la edulcorada Elvis meets Nixon (1977). Sí, oficialmente... pero ¿y si el astuto presidente le encargó una misión secreta? Los documento secretos conseguidos por el director Joel Gilbert desvelen la verdad tras la mentira.
2.- El día después de su muerte: Los datos que rodean su muerte son extraños. Semanas antes de su desaparición retiró cerca de un millón de dólares de su cuenta. Tenía prevista un gira, pero no había contratado músicos ni lugares de ensayo. Pero hay más: familiares comprando un Elvis de cera para poner en el ataúd, su apellido ‘Aron' mal escrito en la tumba (pone ‘Aaron'), un seguro de vida en Lloyds de Londres que aún hoy nadie ha cobrado... y un tipo igual a Elvis comprando un billete para Argentina en el aeropuerto usando el mismo alias que El Rey: John Burrows. Todo esto llevó en 1995 a Phil Aitcheson, presidente de la Presley Commision (1995), a asegurar que no murió sino que se acogió a un plan de protección de testigos. Vuelve la pregunta ¿qué misión le asignó Nixon?
3.- Lucha contra los extraterrestres: una hipótesis muy sensata es que, tras su visita al presidente Nixon, éste le pidiera ayuda para luchar contra los extraterrestres. De hecho, el de Tupelo había visto platillos volantes en más de una ocasión. Según explicó Michael C. Luckman en Alien Rock: The rock'n'roll extraterrestrial connection (Gallery Books, 2005), la noche en que nació se avistó una luz azul sobre su casa. El testimonio se apoya en las declaraciones del peluquero Larry Geller, que dice que se lo contaron, es decir que hay que darle toda la credibilidad que merece. Fuentes sin identificar aseguran que fue destinado a la Luna donde saboteó varias bases nazis e impidió una invasión. Luego renunció a los honores y decidió retirarse a Hawaii. Así era él.
4.- El otro Elvis: Después de dejarnos el Rock, Elvis entendió que la Humanidad ya estaba preparada para alcanzar la madurez, así que decidió quitarse de en medio cambiándose por uno de sus impersonators y pasó a vivir en el anonimato bajo el nombre de Sebastian Haff. Es el argumento de la película, con mimbres de documental, Buba Ho-Tep (Don Coscarelli, 2002). La cinta narra los últimos años de su vida cuando, recluido en un asilo, tiene que enfrentarse a unA momia asesina. En su aventura conoce a Jack, un negro al que los extraterrestres intercambiaron el cerebro con el de JFK, para salvar al presidente del magnicidio organizado por Lyndon B. Johnson. Se anunció una segunda parte, también protagonizada por el gran Bruce Campbell, titulada Bubba Nosferatu: la maldición de las mujeres vampiro que nunca se rodó. ¿Casualidad? No lo creo.
5.- Elvis ascendido: El rey era un hombre del Renacimiento. El día que descubrió que los libros no mordían le dio por acumular todo tipo de conocimientos arcanos asesorado por su peluquero. Así, lo mismo le da a la literatura Rosacruz que a la Teosofía, pasando por cualquier cosa que oliera a esoterismo. Por eso no sería de extrañar que abandonara su existencia humana y ascendiera a un plano superior de existencia. Actualmente, existen varias iglesias Presleyterinas por el mundo que reivindican su legado y que creen a pies juntillas en la profecía que dice que el Elegido "volverá a hollar con sus zapatos de gamuza azul, tierra sagrada de Menfis" a ritmo de Promised Land.
Conclusión ¿Y si murió?: Aunque sólo existen indicios circunstanciales, es una hipótesis que valdría la pena explotar. No resulta descabellado pensar que Elvis fue engañando por Nixon para participar, en 1972, en el asesinato del director del FBI Edgar Hoover (conocido Illuminati) para luego entregarlo a los Masones y presentarse como salvador de América. Pero el Rey se enteró y se vengó a través de Mark Felt (a.k.a ‘Garganta Profunda') filtrando los datos del Watergate al Washington Post. Pero la ‘Mafia de Menphis' -el círculo más cercano al cantante- también estaba a sueldo de presidente y, a modo de venganza, lo cebaron a drogas hasta que murió.