VALENCIA. El objetivo es llenar todos los días. El objetivo es alcanzar las 50.000 entradas. El musical Los miserables ha iniciado una gira por España que le llevará a 20 ciudades,y llega esta semana al Palau de les Arts de Valencia, en lo que supone la primera producción de este género que se representa en el coliseo valenciano.

Durante la presentación del montaje en Valencia, su compositor, Claude-Michael Schönberg, mostró su satisfacción por el hecho de que su obra más popular se representara en un escenario operístico y aseguró que estaba convencido de que incitaría a disfrutar del género lírico a los espectadores no habituales.

Los miserables, que ha sido visto por más de 65 millones de espectadores en todo el mundo, es el mayor musical nacido fuera de Londres y Broadway. El montaje se podrá contemplar hasta el 22 de diciembre en el auditorio creado por Santiago Calatrava y su estancia en Valencia se ha convertido en una de las citas imprescindibles del otoño.

Más de 60 técnicos, 33 de ellos en gira y el resto de Valencia, trabajan en la puesta a punto de las 90 toneladas de material que requiere la producción. Alrededor de un decena de tráilers han transportado el cuantioso utillaje que necesita este espectáculo, como la escenografía, que incluye el suelo; el vestuario; la iluminación y el maquillaje, entre otros elementos, han precisado este miércoles responsables de la productora Stage Entertainment.

Basado en la novela homónima de Víctor Hugo, Los miserables es una historia de épica y de redención de la mano de un hombre, Jean Valjean, que huye de la implacable ley, que no justicia, en la Francia postrevolucionaria y cuyo destino a lo largo de los años le llevará a encontrarse con el amor y el coraje de unos pocos y la miseria de muchos

La visita del montaje musical a Valencia se trata de la "producción más ambiciosa en gira" de Stage Entertainment hasta la fecha, según los responsables de la productora, y para el Palau de les Arts supone una novedad, una apertura a otro tipo de producciones privadas, ahora que la carestía de medios obliga a economizar.