Las Corts rechazaron hoy, con los votos en contra del PP y la abstención de PSPV y No Adcristos, una Proposición No de Ley del grupo Compromís para instar a la Conselleria de Economía, Hacienda y Empleo a que, para poder aprobar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), se exija "siempre" que se acompañe de un plan social que minimice los efectos de los despidos y que prevea la recolocación del personal despedido, además de incluir un seguro que garantice las recolocaciones y, en caso contrario, indemnice a los trabajadores afectados. 

El diputado de Compromís Josep María Pañella, durante la defensa de la propuesta, solicitó al Consell que "asuma su responsabilidad" en la situación económica de la Comunitat y el paro registrado y "deje de tirar balones fuera", con la exigencia de medidas al Gobierno, porque eso "genera más problemática y desconfianza".

Aunque consideró que la política del Gobierno central es "errática", matizó que el Ejecutivo valenciano "tiene competencias asumidas y no está actuando", por lo que le instó a encontrar "soluciones de consenso" ante la situación económica y las cifras del paro, que son, dijo, "las peores" del Estado.

La diputada del PP, Gema Amor, reprobó la "demagogia" de Compromís y les acusó de desconocer los datos reales de la Comunitat, puesto que, según dijo, el número de ERE en la Comunitat está por debajo de la media nacional, puesto que entre enero y noviembre de 2009, los trabajadores afectados por Expedientes en la Comunitat crecieron un 225% frente al 409% del conjunto de España.

Además, apuntó que el 85 por ciento de los ERE --que implican al 90 por ciento de los trabajadores afectados-- son "pactados" entre la empresa y los sindicatos. En este sentido, resaltó que la Generalitat "no interviene para nada" y que su papel es "velar por la legalidad".

Por su parte, el diputado socialista Vicent Sarriá justificó la abstención de su partido porque, pese a "compartir el fondo de la cuestión" sobre la situación económica, en el caso de los ERE "la mayoría se adoptan con acuerdos y se toman medidas de suspensión de empleo temporal, que, aunque es traumática, el efecto es menor", además de ser una herramienta para que los efectos de la crisis sean "coyunturales" y se garantice los derechos de los trabajadores.