
VALENCIA. La sala tercera del Tribunal Supremo ha anulado todas las adjudicaciones de la Televisión Digital Terrerestre (TDT) que otorgó la Generalitat Valenciana en diciembre de 2005. La sentencia es consecuencia del recurso que presentó Tele Elx, la primera televisión local valenciana y que quedó fuera del reparto, y que impugnó la resolución del Consell por las que se adjudicaron un total de 42 frecuencias locales en 14 demarcaciones.
La sentencia, que es firme y definitiva, afecta por tanto a todas las conceciones que se otorgaron en su momento, y que fueron a parar en buena medida al grupo Mediamed, vinculado al empresario José Luis Ulibarri, implicado en el caso Gürtel, entre otras empresas, algunas con fuertes vinculaciones con el Partido Popular.
La sentencia se basa fundamentalmente en dos aspectos. El más importante es el que se refiere a la decisión del Consell, y del entonces conseller responsable, Esteban González Pons, de delegar la ponderación de la valoración de las ofertas presentadas en la empresa privada Doxa Consulting. Según el Supremo, esta fórmula "carece de objetividad e imparcialidad, que es propia de los órganos de la Adminsitración".
Además, el alto tribunal considera que en la resolución, que se publicó en enero de 2006, no se motivaron las razones por las que las ofertas que quedaron fuera, entre ellas la de la demandante, no fueron selecionadas.