VALENCIA. Alberto Fabra celebra su primer 9 d'Octubre como presidente de la Generalitat en una situación especialmente delicada: la crisis económica ha hecho que el jefe del Consell tome la decisión de suprimir los actos lúdicos y el ágape. Una medida que, pese a su pequeño ahorro monetario, 200.000 euros, contiene una alta carga simbólica.
El jefe del Consell reflexiona en Valenciaplaza.com sobre cuestiones relacionadas acerca de la festividad del 9 d'Octubre y la situación de la autonomía valenciana en estos momentos de crisis.
LEA LA ENTREVISTA AQUÍ