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La patronal golpea de nuevo a la Generalitat por sus impagos millonarios a las asociaciones

  • Máximo Such, Alberto Fabra (GVA), Salvador Navarro (CEV) y Ricardo Miralles
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VALENCIA. Las patronales valencianas han desenterrado el hacha de guerra contra la Generalitat y no piensan soltarla hasta que se les pague "lo que es suyo". Si la mañana del miércoles era el presidente de la confederación regional Cierval, José Vicente González, quien ponía negro sobre blanco las exigencia económicas del colectivo, el jueves fue el presidente de la valenciana CEV, Salvador Navarro, quien sentenciaba que han pasado los tiempos de las reuniones y ha llegado el momento de "hacer presión".

Las deudas millonarias que la Administración valenciana mantiene desde 2010 con las asociaciones empresariales está apunto de llevar a la ruina a buena parte del tejido asociativo valenciano. No es sólo que no se les haya entregado el dinero que se les debía transferir para la realización de cursos de formación o actividades de prevención de riesgos laborales, sino que para poder realizarlas, las entidades han tenido que recurrir a créditos o poner el dinero de sus propios fondos.

Además, las entidades denuncian que la Generalitat recibió en tiempo y forma ese dinero procedente del Estado, pero que lo ha ido utilizando desde hace casi tres años  para el pago de otras prioridades, a pesar de ser un dinero con unos fines concretos de los que no pueden ser desviados.  

La patronal autonómica cifra en 25 millones la cantidad que ella misma ha tenido que adelantar para pagar estas actividades, pero no es la única a la que le deben. Como aseguró Navarro, sólo las asociaciones y federaciones de la provincia de Valencia requieren a la Generalitat 33 millones de euros, sin contar con lo que hayan tenido que adelantar los sindicatos, en la misma situación que los patronos, en esta ocasión. 

UN SECRETARIO AUTONÓMICO SALVADO POR LA AGENDA

La apretada agenda del secretario autonómico de Economía, Industria y Comercio, José Monzonís, le salvó el jueves de oírse las quejas de los patronos que acudieron a la presentación de la Federación de Asociaciones de Servicios Empresariales (FASE).

Flanqueado por los impulsores de la organización y por el presidente de CEV, Monzonís hizo los comentarios habituales para estas ocasiones: los retos a los que se enfrentan las empresas, la importancia de la internacionalización y el esfuerzo realizado por el Consell en el desarrollo de la economía valenciana.

Fue al llegar el momento de las preguntas de los periodistas cuando distintos empresarios se unieron en la solicitud del turno de preguntas y el responsable de la Generalitat cumplió con los informadores, se disculpó y dejó la presidencia del acto "por motivos de agenda". Sin embargo, el presidente de CEV siguió atendiendo a la prensa hasta que el responsable de una conocida consultora abrió el fuego contra el Consell.

Lejos de molestarse por la actitud del empresario, el presidente la patronal valenciana detalló lo expuesto la víspera por José Vicente González y concretó el caso de las asociaciones valencianas. Allí expuso la cantidad adeudada a la CEV y al resto de entidades de la provincia: 33 millones, a los que se debe descontar lo que le corresponda a Valencia de los 25 millones adeudados a Cierval.

TIEMPO DE HACER PRESIÓN

Si hace unos meses sólo algunos empresarios se atrevían a expresar en público lo que otros reconocían en privado, son los grandes líderes patronales los que ahora han dado el paso al frente y prometen no amilanarse: "Los tiempos de las reuniones han pasado, tocan los de hacer presión", aseguró Navarro.

La inusual escena de ver a toda la plana mayor de los patronos valencianos descararse ante la Generalitat como lo hicieron en la sala de juntas de Cierval la mañana del miércoles se interpreta como el inicio de una ofensiva que promete momentos embarazosos a más de un responsable público, según fuentes patronales.

El primero en hacerlo hace cuatro meses fue Vicente Lafuente, presidente de la patronal metalúrgica Femeval, al recriminado en público y a la cara los "recortes absurdos" en la política industrial al entonces responsable de la Conselleria de Economía, Enrique Verdeguer, en la entrega de premios de la organización. Habrá más, aseguran distintos patronos.

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