VALENCIA. Los golpes que está recibiendo la Comunitat cada vez que aparece un dato nuevo sobre su economía no está gustando nada a los grandes empresarios valencianos. En un discurso conciliador, exigente, y que ya sonaba a despedida, Francisco Pons, presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), pidió a la Generalitat más eficiencia en la gestión de sus empresas y servicios y propuso auditorias externas para controlar los servicios de sanidad y educación, así como la privatización de aquellas empresas que, como RTVV, estén perdiendo dinero. Además, y en la misma línea, abogó por la creación de una Conselleria que aglutinara Industria, Empresas, Turismo y Energía.

Reacción, profesionalización y contención. En estas tres palabras se podrían resumir las reclamaciones que Pons lanzó a la Generalitat y a los empresarios valencianos en su comparecencia para hacer balance de las acciones llevadas a cabo por el lobby empresarial. A tan solo unas semanas para abandonar su puesto -el próximo 31 de enero le relevará Vicente Boluda-, el empresario aprovechó la ocasión para poner los puntos sobre las íes y pedir al Gobierno autonómico más acciones para paliar la coyuntura económica.

Pons hizo hincapié en la necesidad de controlar el gasto en Educación y Sanidad, y tras recordar que esta partida se lleva el 70% de los Presupuestos Generales, abogó por el copago según la renta de los ciudadanos y pidió al Consell que se hicieran auditorías periódicas y externas para poder controlar la excelencia de los servicios valencianos.

"Hay que perfeccionar y mejorar los sistemas sanitario y educativo para que el ciudadano participe de forma más activa en su coste", declaró. En su opinión, estos controles servirían para conocer los sectores en los que funciona bien la Comunitat y aquellos en los que "nos quedamos en un aprobado raspadito".

LA GESTIÓN PARA LAS EMPRESAS

"La actividad del Gobierno no es gestionar empresas, es gobernar", afirmó Pons. Según el presidente de AVE, "las sociedad públicas, semipúblicas o parapúblicas" que estén perdiendo dinero deberían privatizarse, como Radio Televisión Valenciana (RTVV). "O podrían buscar otras soluciones como el ERE que acaba de anunciar Feria Valencia", destacó Pons, quien añadió que todos los medios que se destinaron para el recinto de exposiciones han pillado a todos a contrapié por la fuerte inversión que hizo  la Generalitat en un "momento de alegría".

Junto al cambio de gestión de las empresas, el patrón lanzó al aire un propuesta aparentemente difícil de llevar a cabo: la creación de una Consellería, capitaneada por expertos apolíticos, que agrupara los departamentos de Industria, Empresas, Turismo y Energía con el fin de concentrar la actividad productiva de la Comunitat. "Sería más eficiente" dijo, ya que además incluiría un directorio para la Innovación.

"La crisis nos ha pillado a todos: políticos, empresarios, trabajadores. Quizá el Banco de España tenía información más real sobre el endeudamiento social y de la administración. Quizá pudo hacer algo y no lo hizo", declaró.

Para revertir los efectos negativos de la crisis o al menos reducirlos, Pons enunció una batería de soluciones que comprenden desde el copago en la sanidad y en la educación, hasta una deducción fiscal de las cuotas de la seguridad social para fomentar la creación de empleo o un mayor apoyo a las empresas pequeñas, de cuales afirmó había ya bastantes en la Comunitat.

EL TRIÁNGULO DE ORO

Además de las iniciativas propias, Pons hizo referencia a las actuaciones lideradas por la Generalitat como la emisión de bonos de deuda pública. A su parecer, la venta de bonos 'patriotas' es una solución temporal para "salvar la situación" pero advirtió que los ingresos del ladrillo se terminarían y no se podía trasladar el endeudamiento de generación en generación. "La deuda hay que devolverla, y cuanto más se tarde, más habrá que pagar", recordó Pons a los políticos valencianos, a quienes les pidió un plan claro para reducir el déficit.

Fomentar las relaciones entre Valencia, Madrid y Barcelona fue otra de las prioridades que el empresario marcó en su hoja de ruta. "Si impulsamos esta línea de actuación tendremos una administración valenciana más fuerte, más empresarios y más fuerza que hará que en Madrid nos atiendan mejor", afirmó el presidente. "El bien de los ciudadanos debe estar por encima de las diferencias institucionales", dijo Pons en referencia al nuevo Gobierno catalán liderado por Artur Mas.