VALENCIA. "Más que con el rechazo, estoy de acuerdo con el respeto al medio ambiente, pero antes de criticar hay que informarse sobre estos trabajos". Quien así habla es Fulgencio Jiménez, consejero delegado de Oil and Gas Capital SL, la empresa de hidrocarburos que ha requerido al Gobierno los permisos necesarios para hacer sondeos petrolíferos en la zona de Gandia (Valencia) y cuya solicitud ha causado gran revuelo en la Comunitat.
La decisión del Gobierno, anunciada el pasado mes de diciembre, de permitir exploraciones en busca de petróleo en decenas de miles de hectáreas en territorio valenciano no ha sido acogida con agrado por parte de los dirigentes políticos valencianos. Tanto el Consell como los partidos de la oposición y los ayuntamientos han aportado argumentos en contra de la medida por considerarla perjudicial en todos los ámbitos.
Como es natural, Oil and Gas Capital SL se posiciona en el lado contrario, ya que según explica su recién nombrado consejero delegado -ex alto cargo de Repsol-, el cuidado del medio ambiente es la primera de sus prioridades. "No venimos para dar el pelotazo e irnos, somos inversores de alto riesgo y el respeto y la seguridad es lo más importante".
La sociedad está presidida por Agustín Domínguez Esteban y sus consejeros son Francisco Javier Olmedo y Ricardo Sánchez. María Luisa Caravantes, hasta ahora consejera delegada, ha pasado a ser la apoderada y su puesto ha sido ocupado por Jiménez. Según éste último, todos los profesionales del equipo cuentan con una experiencia de más de 35 años en el sector, motivo por el cual decidieron crear la sociedad en 2009 y no antes. "Hay que tener una altísima cualificación y conocer mucho la zona, España en este caso, para dedicarte a esto", declara Jiménez.
INVERSIÓN Y EMPLEO
Esta empresa, la segunda en pedir los permisos tras la multinacional Cairn Energy, a quien ya han sido concedidos, fue creada en Madrid hace año y medio con una primera inversión de 4.000 euros que se amplió a 8.000. Según fuentes de la compañía, hasta el momento han invertido alrededor de 600.000 euros, pero esta cantidad se quedaría en nada de conseguir los permisos en busca del petróleo.
El desembolso si obtienen el permiso del Gobierno sería de entre cinco y diez millones de euros sólo en los trabajos previos a los sondeos en las 20.000 hectáreas en las que planean explorar desde Cullera hasta Gandia. Según los resultados, esta inversión se multiplicaría de forma exponencial beneficiando, según el consejero delegado, al entorno local con la creación de puestos de trabajo.
"Trabajaríamos en un diámetro muy reducido que no va a perjudicar al medio ambiente. El proyecto es positivo porque crearía puestos de trabajo para la gente de la zona, aunque todo depende de los resultados, ya que jugamos mucho con la probabilidad", explica Jiménez.
BENEFICIOS A LARGO PLAZO
Además del proyecto en Valencia, Oil and Gas Capital está tanteando otros cinco en España y su mayor interés reside en las cuencas "con potencial", ya que según explican, creen que hay mucho que hacer en este campo. "Los políticos deberían cambiar su óptica respecto a este tema", afirma Jiménez, que asegura que los primeros interesados en hacer bien las cosas son ellos por la cantidad de dinero que invierten. La empresa se financia a través de un grupo inversores, cuyo nombre prefirió eludir, y que están estudiando hacer otra ampliación de capital.
Los beneficios económicos que pueden alcanzar son una incógnita, ya que como destacaron desde la empresa, juegan mucho con las probabilidades. De momento no esperan tener ganancias hasta pasados cinco años, porque como dicen, los resultados "hay que construirlos".