
VALENCIA. El vicepresidente del Consell, José Císcar, ha perdido otro estrecho colaborador de su gabinete. El Diario Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV) publica este miércoles el cese del asesor parlamentario Rubén Cortés; un abandono que, según fuentes de su entorno, se debe al deseo de dirigirse a la empresa privada, donde ya habría aceptado una oferta relacionada, apuntan, con la educación privada y la sanidad de ámbito nacional. Una oferta "irrechazable", apuntan dirigentes próximos al alto cargo, que le ha motivado para salir de la Generalitat.
Cortés, licenciado en Ciencias del Trabajo y diplomado en Relaciones Laborales, fue años atrás asesor en la Conselleria de Territorio y Vivienda y posteriormente asesor parlamentario en la de Educación, Formación y Empleo. Desde enero de 2012, desempeñó el cargo de director general de Participación Ciudadana de la Conselleria de Presidencia. Su ascenso fue rápido y continuado en el Gobierno valenciano y su competencia venía avalada desde todos los departamentos en los que había trabajado en los últimos años, por lo que fue trasladado mediada la legislatura a Presidencia de la Generalitat, concretamente, a la Dirección General de Análisis y Políticas Públicas.
Las discrepancias con la secretaria autonómica de Organización y Coordinación, Esther Pastor, y el deseo de Alberto Fabra da dar un giro a la estrategia política y comunicativa, terminaron con la destitución de buena parte de la cúpula del departamento, incluido Cortés. Císcar, no obstante, no estaba dispuesto a dejar en la 'cuneta' a un activo que consideraba valioso, por lo que le recuperó como asesor de la conselleria.
En agosto de 2013, Císcar también vio como dejaba el cargo por similares motivos su entonces número dos, el entonces subsecretario de la Conselleria de Presidencia, Jesús Marí, quien recaló en la escuela de empresarios Edem, impulsada por Juan Roig.