VALENCIA. La polinización de las flores es vital para nuestra alimentación y para la biodiversidad, pero las abejas, unas de las principales encargadas de esta misión, están desapareciendo. Lo llaman elocuentemente 'síndrome de despoblamiento de las colmenas' y el origen parece ser multifactorial pero el hecho irrefutable es que la merma en las poblaciones de este insecto y consecuentemente la pérdida de la intensidad en su acción polinizadora está afectando a la flora silvestre y por lo mismo a la agricultura. La falta de floración o los problemas crecientes de cuajado en los frutales y frutos secos están reduciendo de forma evidente la productividad. En hortícolas, por su parte, cada vez es más frecuente la colaboración entre productores de semillas y apicultores.

La estructura productiva de la Comunidad Valenciana, dominada por la citricultura, ha agravado las consecuencias de este proceso con medidas y prácticas que han acelerado innecesariamente la despoblación de las abejas, imponiendo durante décadas órdenes que han obligado a alejar los asentamientos colmeneros de las plantaciones de agrios en época de floración, justo cuando ancestralmente se aprovechaba tal circunstancia para producir una de las mieles más valoradas, la de azahar.

El 'Encuentro entre Apicultores y Agricultores' que se celebrará este viernes 10 de julio pretende sentar las bases para un nuevo y enriquecedor modelo de convivencia entre ambos colectivos en el que todos, citricultores, productores de frutales, de frutos secos, horticultores y, por supuesto, los colmeneros puedan salir ganando. Para ello, se cuenta con el testimonio y el apoyo de La Unió de Llauradors, sindicato agrario de referencia en la Comunidad Valenciana y principal organización representativa de los apicultores, con la organización ecologista que promueve la campaña planetaria 'Save the bees' el mayor esfuerzo de concienciación social en este terreno que jamás se ha realizado y con el respaldo académico de la Universidad de California, que aportará luz sobre una estructura agraria la de este Estado norteamericano en un clima similar al mediterráneo en la que la apicultura hace de puente entre agricultores contribuyendo a mejorar la rentabilidad de citricultores, productores de frutales y de frutos secos.

Existen soluciones, tecnologías para garantizar esa armoniosa y sostenible relación. Sí, definitivamente, 'Las abejas son la solución'.