VALENCIA. La polémica subasta de la Ciudad de la Luz podría ser "nula de pleno derecho". Así lo cree Santa Ana Corporación Empresarial, una de las empresas interesadas en adquirir el complejo de Alicante, que como adelantó Información ha solicitado paraiizar el proceso.

El grupo con sede en Sant Vicent del Raspeig denuncia "graves irregularidades" en una carta dirigida al Consejo de Administración de los estudios cinematográficos a la que ha tenido acceso este diario. El escrito fue presentado el mismo día que el empresario francés Bruno Granja presentó la única oferta por el complejo, descartada por no ajustarse a los pliegos.

La principal objeción de Santa Ana es que las dimensiones del complejo subastado "no se asimilan" con los datos que constan en el Catastro ni con los del Registro de la Propiedad, por lo que concluye que resulta "imposible" conocer las "dimensiones exactas" de la Ciudad de la Luz.

La corporación también cuestiona la división del complejo en seis lotes, partición que determina "que la explotación económica del complejo devenga inviable". Santa Ana, además, considera esencial que salgan a subasta también las dependencias destinadas a restauración y oficinas, que actualmente están excluídas del proceso.

Por todo ello, este grupo interesado en la compra de la Ciudad de la Luz reclama que se reinicie nuevamente la licitación. La opción del Consell no ha sido esa sino postergar un mes la subasta para garantizar que concurran más candidatos. En el fondo se trata de rentabilizar al máximo la venta de un complejo que costó alrededor de 300 millones de euros y que la Generalitat tasó en 94,4 millones. A la vuelta del verano sigue el culebrón.