VALÈNCIA. El Palau de la Música continúa sumando problemas a su mochila. El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha anulado la elección de Vicent Ros como director y ordena al auditorio, presidido por la concejala Glòria Tello, a valorar de nuevo los méritos del resto de candidatos que accedieron al concurso impulsado por el Ayuntamiento de València. La sentencia, adelantada por Levante-EMV y a la que ha podido tener acceso este diario, llega como respuesta al recurso del también candidato Josep Ruvira, que obtuvo la segunda mejor puntuación para la comisión que tomó la decisión, un fallo que estima “parcialmente” el recurso de reposición declarando la “nulidad” en cuanto al nombramiento de Ros.
“Ordenamos retrotraer el procedimiento en que se produjo el vicio invalidante para que se valoren nuevamente los méritos de los candidatos, currículum y planes presentados, dictándose nueva resolución y nombrando a quien corresponda de acuerdo con la evaluación que le corresponde realizar al Tribunal calificador […] sin permitir la abstención de ninguno de los miembros”, reza el fallo de la sentencia, contra la que cabe recurso, que deberá presentarse en un plazo de 30 días.
El fallo hace referencia a la "abstención indebida" de tres de los miembros de la Comisión de Evaluación, "que no decidieron ni votaron", unas abstenciones que el tribunal considera no justificadas y que llevan a la declaración de nulidad del nombramiento de Ros. Si bien la parte apelante habla de una retroacción "estéril" al tratarse de una una comisión de ocho miembros, el TSJ estima que "no se puede prejuzgar el resultado de la votación [...] ya que la participación de los miembros que se han abstenido pueden alterar ese resultado según sus argumentos y conclusiones".
Horas después de conocerse la sentencia, el Ayuntamiento de València ha calificado la abstención de los tres componentes del tribunal como un “defecto de forma” y se congratulan por el hecho de que la estimación del recurso sea parcial. “Dicha abstención, aunque no estaba contemplada expresamente en las bases que rigieron el Concurso Internacional […] tampoco estaba expresamente prohibida e incluso fue entendida y aceptada por el resto de los componentes de la mencionada comisión”, defienden desde el Palau de la Música. Efectivamente, el tribunal estima el recurso parcialmente, pues en relación a la valoración de méritos, la sentencia "no comparte que el acuerdo no esté suficientemente motivado y que no se hayan respetado los principios de mérito y capacidad” y, de igual forma, se deniega la petición del recurrente de que se le otorgue el puesto de director del auditorio, por lo que el Ayuntamiento ha mostrado su “satisfacción”.
El revés judicial ha suscitado las críticas de la oposición, que han tildado de “despropósito” la gestión cultural del Ayuntamiento. Así, la concejala popular Julia Climent ha apuntado a la dejadez de Ribó como la causa de que “el prestigio del Palau de la Música esté en horas bajas y de que, en muy poco tiempo, esté acabando con lo que debía ser el buque insignia de la cultura en Valencia”.
Nuevo golpe a un Palau cerrado
Este último hecho provoca la tormenta perfecta para el Palau de la Música, que arrastra un temporada de grandes incertidumbres desde que se vio obligado a cerrar sus instalaciones en junio de 2019 debido al desprendimiento de parte del techo en la sala Joaquín Rodrigo. Un estudio posterior señalo la necesidad de hacer una obra mucho más profunda que dejará al principal centro cultural dependiente del Ayuntamiento de València sin actividad en su interior hasta, al menos, 2022.
Los plazos previstos juegan en contra de esa aspiración. En el primer paso de esta obra, un recurso del Colegio de Arquitectos de Valencia dejó en suspenso el concurso para el proyecto, aunque el pasado 10 de marzo, el Tribunal de Recursos Contractuales lo desestimó. Esto ya ha supuesto un cambio en el primer paso de la reapertura: el proyecto se tiene que redactar para luego poder licitar las obras. Los andamios no se verán por el Palau de la Música hasta 2021.
Mientras, esta situación obligó al equipo dirigido por Vicent Ros a reubicar toda la programación en otros escenarios, como el Palau de les Arts o el Almudín. Esto ha conllevado algunas cancelaciones esta temporada, y la frenada de la agenda cultural a causa del coronavirus ha acabado de rematar esta temporada horribilis.
Según la estimación hecha por el personal técnico del servicio de Contratación en diciembre de 2019, el proyecto podría estar formalizado a finales de marzo. Sería entonces cuando empezaran a contar los tres meses de ejecución. A principios de mayo, a pesar de que se ha conseguido sortear la suspensión de los plazos administrativos, se han abierto los sobres de las propuestas pero aún no se ha resuelto el concurso. En cuanto a las licitación de las obras, el consistorio calculaba que se publique a mitad de septiembre de 2020 y se adjudique durante el primer trimestre de 2021, sin tener en cuenta posible recursos, bajas o enmiendas.
Vicent Ros. Foto: EVA MÁÑEZ.
