VALÈNCIA. Delcae, empresa dedicada a la emisión de certificados de ahorro energético, pone el foco en la Comunitat Valenciana. Según cálculos realizados por la propia compañía, el mercado valenciano de este tipo de certificados podría mover en torno a los 2.500 millones en esta materia hasta el año 2030. Delcae fue creada hace un año por Elena González Sánchez y Honorato López Isla, otrora directiva y CEO de Unión Fenosa. Actualmente, González es la CEO de la compañía, mientras. El equipo lo completan dos ex de Acciona: Javier Avendaño, como director comercial; y Javier Martínez Belotto, como director de operaciones.
Tal y como señala el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, un certificado de ahorro energético (CAE) es un documento electrónico que garantiza que se ha conseguido un ahorro de energía equivalente a 1 kWh tras haber realizado una actuación de eficiencia energética. Es decir, si una empresa renueva su maquinaria y logra un ahorro anual de 300 kWh, obtendría 300 CAE.
Lo que permite este documento es monetizar la eficiencia cosechada, puesto que este certificado se puede comprar o vender. Con ello, particulares y empresas pueden sufragar parte del coste de los cambios realizados. Ahora bien, ¿a quién le podría interesar un documento que certifique un ahorro energético? El sistema CAE nació por "la necesidad de generar nuevos ahorros de energía" mediante proyectos de eficiencia energética de cara a cumplir con las obligaciones españolas con la Unión Europea.
En concreto, el sistema obliga a las empresas energéticas (comercializadoras de gas y electricidad, así como operadores al por mayor de productos petrolíferos y GLP) a conseguir una determinada cantidad de ahorro energético al año. Para ello, pueden contar con certificados CAE que recojan este ahorro o bien pagar al Fondo Nacional de Eficiencia Energética la cantidad económica correspondiente al ahorro que deberían generar. El Fondo destina el dinero recabado a dar ayudas a proyectos de eficiencia energética.
Es decir, las empresas energéticas pueden comprar CAEs a un precio más económico que el que determina el Fondo, de manera que cumplen sus obligaciones de una forma más barata y, al mismo tiempo, los sujetos que han realizado las mejoras de eficiencia energética reciben una contraprestación por dicha acción. Para articular este sistema es donde entran en escena los sujetos delegados, empresas entre las que se encuentra Delcae y que se dedican a certificar actuaciones de eficiencia energética. Actualmente hay registradas un total de 40 entidades dedicadas a este servicio.
"De media, la monetización de estos ahorros cubre entre un 10% y un 30% de la inversión. Ahora estamos viendo actuaciones con las que se está cubriendo hasta casi el 100%, con lo cual está francamente bien", valora la CEO de Delcae. Por otro lado, González remarca que este tipo de certificados permiten a los usuarios obtener de forma rápida (entre dos y tres meses desde la mejora de la eficiencia) una retribución económica por la acción realizada.
En este sentido, destaca que la venta de CAEs permite financiar parte de la inversión de forma más rápida que mediante gran parte de las actuales subvenciones, lo que supone que particulares y empresas puedan "planificar cómo financiar sus actuaciones" de una mejor manera.
González, además, incide en que este tipo de certificados los puede solicitar cualquier persona que haya realizado una actuación de eficiencia energética, no solamente una gran empresa. "Si haces una rehabilitación integral en una comunidad de vecinos, recibes CAEs por las actuaciones realizadas; En términos proporcionales puede que se cubra la misma parte de la inversión que una industria", ejemplifica.
La CEO de Delcae, eso sí, reconoce que "donde hay un potencial muy alto de conseguir CAEs" en términos absolutos es en la industria, debido a que se pueden realizar actuaciones que generen un elevado ahorro. "La Comunitat Valenciana es una autonomía industrializada, con un sector electro intensivo muy potente", valora González, que no obstante considera: "Hay que acelerar un poco porque, hasta donde nosotros sabemos, sólo se han emitido 11 CAEs en la Comunitat, de los cuales 4 son nuestros".
En esta línea, considera que la Comunitat Valenciana podría beneficiarse de entre 2.500 y 3.000 millones de euros derivados del sistema CAE hasta 2030. Un cálculo para el que se ha tenido en cuenta el peso del PIB autonómico y el precio al que las energéticas pagan sus obligaciones al Fondo Nacional.