Sala de Escape de SKP Room. Foto: SKP ROOM GAMESVALÈNCIA. Los escape rooms llegaron a València hace menos de diez años para implantarse como una de las actividades de ocio y entretenimiento que ofrecen algo diferente a lo acostumbrado: escapar. Desde cuartos simulando una prisión o "bombas" que hay que desactivar antes de que exploten, estos juegos de aventura mental en los que hay que solucionar enigmas para poder salir de salas también han tenido que extremar sus ya establecidas medidas sanitarias con el fin de hacer frente a la crisis sanitaria.
Guantes, mascarilla, ventilación o desinfecciones son solo algunas de las medidas de prevención adaptadas en estos juegos con el objetivo de garantizar la máxima seguridad posible a los equipos participantes. Desde Valencia Plaza nos hemos puesto en contacto con tres escape rooms de la ciudad para que nos detallen su funcionamiento dentro de esta nueva normalidad: Escape room Valencia The Exit, Black Key Escape Rooms y SKP Room Games.
En todos ellos, el uso de la mascarilla es obligatorio tanto dentro como fuera del juego aunque los compañeros sean convivientes domiciliarios. Del mismo modo, los geles hidroalcohólicos desinfectantes y la señalética por el espacio también están presentes en las tres empresas de escape.
Desde The Exit, además, se informa al diario de que en su local también se proporciona a los clientes guantes para que puedan participar con seguridad, al igual que se prohíbe el uso de los baños. Asimismo, subrayan que es "muy importante" que una vez colocados los guantes los clientes no se toquen la cara con el fin de "evitar que se contaminen y pierdan su función". Al finalizar el juego, estos deberán ser desechados en una papelera separada.
En el caso de Black Key, los guantes -proporcionados por el centro de manera gratuita- son una posibilidad a elegir para los jugadores. Si se decide por no emplearlos, existe igualmente la obligación de desinfectar las manos antes y después de cada partida, según detallan.
En SKP Room Games, por su lado, se desinfectan las suelas de los zapatos del grupo antes de entrar a la partida, aparte de dar también gel hidroalcohólico desinfectante para las manos. Su gerente remarca, además, que cuentan con mascarillas de reemplazo por si a alguien se le rompe la que lleva durante el juego.
Lo difícil para estos juegos consiste es conseguir que los clientes mantengan la distancia de seguridad una vez dentro de la sala, por lo que es una responsabilidad que recae de forma directa sobre los usuarios. No obstante, ante esta situación, los escape han alargado los tiempos entre las sesiones con el objetivo de proceder a la ventilación y higienización correspondientes.
Por ejemplo, Black Key Escape Rooms comenta que gracias a esta medida pueden desinfectar todo lo que se toca durante las partidas con productos viricidas homologados. Asimismo, explica que en el local se mantiene la renovación de aire durante toda la actividad, un sistema que ya estaba instalado incluso antes de la pandemia a causa de las condiciones de espacio cerrado de este tipo de actividades.
En esta línea, The Exit también realiza una limpieza con productos viricidas en zonas comunes y dentro de las salas, por lo que es posible que a veces de bloqueen algunas sesiones. Sin embargo, la disponibilidad de las mismas siempre se podrá consultar en sus calendarios de la pagina web, tal y como subrayan desde el centro.
El gerente de SKP Room Games comenta que desde un principio quisieron "hacer las cosas bien", por lo que se asesoraron por varios arquitectos para poder remodelar el local. Es aquí donde les dijeron que era necesario la ignifugación del techo, la instalación de un aire acondicionado por conductos en todas las salas y un renovador de aire, tres elementos con los que ya cuentan. Este último aparato trata el aire, lo renueva y lo mantiene en constante circulación, "lo que permite renovar el aire de las salas del juego al 100%".
A su vez, en este local cada vez que entra una reserva cierran las otras salas de la misma hora para que en ningún momento hayan dos grupos en todo el local. Del mismo modo, decidieron bajar al 30% la capacidad para asegurar la renovación del aire y cada día se lava el suelo antes de abrir con seis -o siete- pastillas viricidas.
Para proceder a estas desinfecciones, los escape rooms matizan que es "importante" que antes de entrar el grupo esté completo, ya que en ninguno podrá entrar nadie antes de la hora del inicio de sesión para no interrumpir con las labores de limpieza y desinfección. Estos grupos no han visto reducido su número de participantes, ya que de por si no superan el máximo de diez personas.
Al igual que con otros comercios, la crisis sanitaria ha producido una "notable reducción" en el número de reservas en el sector de los escape rooms, tal y como explica The Exit a este periódico matizando que cada empresa contará con su propio punto de vista respecto a la situación. No obstante, afirman que conforme pasan las semanas se va notando un "ligero aumento" de estas, por lo que esperan estar de nuevo "al 100%" para la campaña navideña.
Como curiosidad, desde este juego de escape comunican que lo que sí que ha aumentado "mucho" son las reservas de parejas, tal vez porque "es mucho más sencillo poder jugar solo dos personas que tratar de formar un grupo más grande".
Desde Black Key Escape Rooms también comunican que ha bajado "un poco" la demanda pero que es un tipo de ocio que funciona por el "boca a boca", por lo que si a un grupo le gusta la actividad muy probablemente acuda más afluencia de gente recomendada por ellos las siguientes semanas.
Con todas las medidas implantadas, la gente ha vuelto a acudir a los Escape Rooms para poder disfrutar de la experiencia. Es por esta razón que desde Valencia Plaza hemos preguntado a diferentes clientes sobre su sensación de asistir a los juegos con estos nuevos protocolos de seguridad.
Jennifer Torres, por ejemplo, ha participado en dos durante esta nueva normalidad y explica que tenía muchas ganar de acudir a un escape otra vez, pero que tenía miedo por no saber quiénes habían estado antes en la sala, debido a que cuenta con personas de riesgo en su casa. No obstante, al participar en uno observó que se habían tomado todas las medidas y que se incide mucho en la puntualidad para poder desinfectar los espacios entre sesiones. "Me han parecido súper bien las medidas, además la experiencia de diversión es igual que antes de la pandemia, solo que ahora llevas mascarilla", subraya.
Una sensación que también comparte Lorena Vara, quien asistió por primera vez a un escape room este verano a pesar de contar con dudas respecto a la desinfección, ya que las pistas de estos juegos son tocadas por los anteriores participantes con el fin de escapar. La chica subraya que en el local al que fue se le transmitió "mucha seguridad y confianza", debido a que le mandaron el protocolo previamente, se cumplían las medidas y todos los trabajadores mantuvieron siempre la distancia de seguridad aún participando con su grupo en la partida. Asimismo, Sofía Ortega, quien acudió con Lorena y Jennifer al mismo escape comenta que el tema de la mascarilla no fue "incómodo" y que se lo pasaron "muy bien" con todas las medidas, por lo que "merece la pena ir".
Celia Martínez fue con sus amigas en verano y explica que, en su caso, también se incidió mucho en la puntualidad para asegurar la desinfección, del mismo modo que los trabajadores mantuvieron la distancia de seguridad y se les dio la posibilidad de llevar guantes. "La experiencia fue muy bien, estaba todo muy bien organizado y me sentí segura. La verdad es que no se nos hizo nada pesado porque estaba el aire acondicionado, lo cual hacia que no tuviéramos calor en verano y que no nos molestara la mascarilla", matiza.
