Desde finales de 20218 escribo artículos para avisar del drama existente en las administraciones públicas con respecto al personal informático. En estos cinco años se ha agravado el problema de incorporación de personal cualificado a las áreas de tecnologías de la información. El problema no es exclusivo del sector público, también se da en el sector privado, pero éste intenta resolver el problema poniéndose a la altura que el mercado profesional requiere. El sector público no lo está haciendo.
A los dos sectores les está costando mucho resolver la feroz demanda y el robo de talento del personal TIC, pero en el sector público es un drama. Soy presidente de la asociación nacional Atial (Asociación de Técnicos de Informática de la Administración Local) y desde la misma advertimos de este grave problema que afecta a muchas entidades públicas.
En la actualidad se requiere urgentemente que las administraciones públicas aumenten el personal y las inversiones en material TIC, existe legislación en vigor para modernizar dichas entidades que se crearon bajo paradigmas de otras épocas ya obsoletas. Algunas de estas leyes obligan a duplicar los servicios que las entidades públicas ofrecen, a la tradicional entidad física con su edificio consistorial, se incorpora la sede electrónica disponible online permanentemente. También se establecen los nuevos marcos y procesos de intercambios de información para evitar entregas innecesarias por parte del ciudadano, etc. Todos ellos, nuevos procesos, métodos y disponibilidades acordes con la idea principal de modernizar la sociedad y ayudar al ciudadano.
Pero si eres conocedor de la situación actual de las entidades locales, observarás que con la legislación se quiere tener un avión sin pilotos que lo dirijan. No hay informáticos, ni los habrá a corto plazo, porque los salarios del sector público están a años luz de los salarios del sector privado. Teóricamente cuando el sector público convoca un proceso selectivo de personal informático, intrínsecamente y entre otros muchos factores, se quiere “elegir al mejor cualificado para el puesto”. En la actualidad, la realidad consiste en: “por favor que haya alguien que se presente al proceso selectivo, al menos uno, y además si toma posesión se quede y no se vaya”.
Este drama se ve en la docencia. A día de hoy no se han cubierto el 100% de las plazas vacantes de profesores de informática. Se está viendo en muchos ayuntamientos que no tienen informáticos y, la mayoría, no tienen completa la plantilla TIC. Hay diputaciones que no pueden cubrir ni el 50% de su plantilla de informáticos. Hay entidades públicas autonómicas que, por más procesos selectivos que publiquen, no pueden cubrir el 100% de sus ofertas para informáticos. Hay ayuntamientos que están suplicando bolsas de informáticos a otras entidades locales, hecho que, según algunas leyes, se podría considerar hasta ilegal.
Ojo a esto último, el drama es tal, que hay entidades que se arriesgan a cometer posibles ilegalidades porque no tienen forma de tener en su plantilla a informáticos. Llevamos muchos años avisando de este drama y si no ponemos soluciones reales, nuestras entidades públicas no tendrán informáticos y nuestros hijos no tendrán profesores de informática.
Fernando Torregrosa Navarro es presidente de Atial