TRIBUNA LIBRE / OPINIÓN

Economía circular, un modelo de gestión más allá de las tendencias

La creciente escasez de este recurso está forzando un cambio en la concepción sobre el agua y los modelos de gestión

9/05/2016 - 

Desde la revolución industrial, los residuos han crecido constantemente. Nuestra economía se ha gestionado bajo un sistema lineal basado en el “TakeMake- Consumir y desechar”, partiendo del supuesto de que los recursos son abundantes, disponibles y baratos de eliminar. Sin embargo, esta perspectiva ha cambiado, los nuevos modelos de gestión nos obligan a reutilizar, reparar, renovar, reciclar, en definitiva, a aprovechar al máximo los recursos de los que disponemos.

La estrategia de la Unión Europea considera la sostenibilidad H2020, junto con el conocimiento y la inclusión social, como uno de los tres motores para el crecimiento, la creación de empleo y la competitividad económica en Europa. Avanzar hacia una economía más circular es esencial para cumplir el programa de eficiencia de los recursos establecidos en la Estrategia Europa 2020 y alcanzar un crecimiento inteligente, sostenible e integrador.

En el campo de la gestión del agua esta perspectiva no varía mucho de la establecida a nivel global. La creciente escasez de este recurso está forzando un cambio en la concepción sobre el agua y los modelos existentes para gestionarlo. El nuevo paradigma concibe al agua como un recurso básico para la vida humana que ha de ser gestionado como un bien económico escaso de creciente valor.

La economía circular o modelo de gestión sostenible comienza para Hidraqua en el momento en el que se inicia el ciclo integral del agua, consiguiendo un mayor rendimiento y aprovechamiento de cada gota y de los medios empleados para gestionarla. En este sentido Hidraqua invierte cada año más de 30 millones de euros en nuevas infraestructuras y renovación de las ya existentes. Pero además, el uso que nuestros clientes realizan del agua resulta indispensable para que el aprovechamiento del recurso sea mayor.

Por ejemplo, si el agua que llega a la red de alcantarillado contiene altos niveles de contaminación, resulta más difícil su depuración y se reduce por tanto el volumen de agua que puede ser reutilizada. En el caso del polígono industrial de Fuente del Jarro, ubicado en Paterna el índice contaminante de las aguas residuales era de 9,56 en el año 2000. Para reducir estos valores, Aigües de Paterna, empresa participada por Hidraqua y el Ayuntamiento de la localidad, puso en marcha una campaña de control de vertidos que ha permitido reducir en un 90% los niveles de contaminación. Hoy se sitúan en 0,99.

A continuación, una vez el agua ha sido regenerada, ésta debe ser reutilizada. En Hidraqua, cada año más de 36 millones de metros cúbicos de agua depurada se reutilizan en agricultura, baldeo de calles, riego de zonas verdes, gestión de espacios naturales, etc. Hay quién podría pensar que aquí finaliza nuestra labor en materia de economía circular y probablemente en este punto no ha hecho más que empezar.

Por ejemplo, ¿qué salida se les da a los lodos que generamos en las depuradoras para cerrar el círculo? Principalmente se utilizan para aplicación directa en la agricultura y para valorización energética como combustible en cementera, tras pasar por un proceso de secado térmico aprovechando el calor residual de los hornos de la propia cementera. Por otro lado, Hidraqua cuenta con un convenio con la Universidad Miguel Hernández para utilizar estos residuos en la elaboración de un compost que favorece el desarrollo temprano de las especies arbustivas en ambientes mediterráneos.

Eficiencia energética

Al principio del artículo exponía que la economía circular no sólo afecta al recurso que gestionamos, sino que incluye todos aquellos factores que intervienen en esta gestión. Así por ejemplo, con el objetivo de equilibrar la huella de carbono de nuestra actividad organizamos campañas de repoblación como la celebrada recientemente en Torrent, Pego, Elche, entre otros; y superamos autorías de eficiencia energética, disponiendo en algunas de nuestras empresas de economía mixta como Aguas de Alicante de la ISO 50001, que nos certifica como empresa comprometida con mejora continua en el desempeño energético.

En definitiva, el concepto economía circular no debe concebirse como una iniciativa aislada y puntual, sino como un modelo de gestión que debe abarcar todas las dimensiones de nuestro negocio. La reutilización de agua, conseguir que esta tenga las mejores condiciones posibles para obtener una depuración eficiente, implantar medidas que permitan reducir el consumo de energía, la puesta en marcha de acciones que equilibren la huella de carbono generada por la empresa, reciclar los materiales de obras y utilizar energías renovables, son sólo algunas medidas implementadas hoy para seguir avanzando mañana hacia un modelo totalmente sostenible, que nos permita cubrir nuestras necesidades sin comprometer los recursos y las posibilidades de las generaciones futuras.

* Francisco Bartual es director general de Hidraqua