Tello destaca la voluntad de "reafirmar la identidad propia" de cada sala municipal tras años en los que "se han hecho cosas por motivos clientelares"
VALENCIA, (EP). La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Valencia está estudiando que el Museo Marítimo que proyecta para la ciudad tenga varias sedes --en principio un máximo de tres-- con el objetivo de revivir la zona marinera" de la capital y "dinamizar todo el distrito marítimo". Por ello, además de las Atarazanas, que se consideran el espacio "natural" para un centro de estas características, se están analizando otros lugares en el entorno del Cabanyal, Canyamelar, el Puerto, Grau y Nazaret.
Así lo ha detallado la concejala de Cultura, Glòria Tello, en una entrevista concedida a Europa Press en la que ha reivindicado el Museo Marítimo como "una necesidad para esta ciudad". "No tiene sentido que una ciudad como Valencia no tenga un museo marítimo, pero es que tampoco lo hay en Castellón o Alicante, solo hay museos de este tipo en algunos municipios pero a pequeña escala. Hace falta un museo que represente a las tres provincias, potente, porque no lo hay y la Comunitat es un anfiteatro hacia el mar", ha aseverado.
Bajo esta premisa, las tres administraciones --autonómica, municipal y la Diputación provincial además de la autoridad portuaria-- están manteniendo varias reuniones para decidir el o los espacios donde instalar el futuro museo. "Pensamos que el espacio natural son las Atarazanas pero considero que podríamos hacer más de una sede que sirviera también para revivir la zona marinera de esta ciudad que, desgraciadamente, es una de las más perjudicadas", ha argumentado.
Tello ha concretado que la idea es acondicionar un máximo de tres sedes para "articular toda la zona marinera". En cuanto a los contenidos, ha recalcado que la voluntad es que no sea un museo marítimo "anclado en los modelos tradicionales", sino "del siglo XXI y dinámico". Ese Museo Marítimo forma parte de la política de museos de la Concejalía que dirige Tello, que pretende acabar con un "gran problema: existe una red amplia de museos pero no tienen ninguna identidad dentro del ecosistema valenciano". "Eso es fruto de que durante muchos años se ha llevado a cabo el todo vale en cualquier sala y eso es un error muy grave. Además, --ha proseguido-- en los últimos años se han hecho muchas cosas en base a motivos clientelares; exponían o hacían sus proyectos aquellas personas que agradaban al equipo de gobierno".
Eso no quiere decir, ha precisado, "que antes no se hicieran buenas exposiciones, que sí, pero no todo el mundo tenia oportunidad de llegar y eso, sumado a que todo valía igual para un roto que para un descosido, ha hecho que nuestras salas pierdan identidad". Ahora, señala Tello, se ha abierto un "proceso para reconvertir todo esto" basado en una convocatoria pública de proyectos expositivos que serán elegidos por un tribunal profesional --contará con representantes del sector y de la universidad, entre otras instituciones--, que decidirá "qué se hará y en qué sala".
La edil ha informado de que se han recibido 111 propuestas. "No tenemos ni salas ni años para exhibirlas todas", ha dicho Tello entre risas, pero se ha felicitado por la gran participación porque "quiere decir que la ciudad está en un momento de evolución brutal". Con esta renovada programación --que se empezará a aplicar a partir de 2017 aunque Tello confía en que a finales de este año se pueda realizar ya alguna muestra-- se reafirmará además la identidad de cada sala.
En este sentido, ha avanzado que la previsión es que la Sala de Exposiciones del edificio del Ayuntamiento tenga un carácter "más noble", mientras que la Galería del Tossal sea "más ciudadana". Al Museo de la Ciudad, ha comentado, hay que "hacerle un pensamiento para dotarlo de coherencia porque ahora mismo es un totum revolutum". "Que todo el mundo sepa que aquí todo el mundo cabe, y que las salas tendrán su propia identidad", ha rematado.