Vicent Sarrià, presidente de la entidad, asegura que el salario del dirigente "se estudiará en la junta de gobierno"
VALENCIA. La Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi) -firma pública en la que el Ayuntamiento de Valencia aglutina la mayor representación municipal- mantiene el sueldo de 88.000 euros a su gerente, Joaquín Juste Méndez. El dirigente percibe este salario desde 2011, cuando accedió al cargo durante el gobierno de Rita Barberá en el consistorio de la Capital del Turia.
Así lo confirma a Valencia Plaza el presidente de la Emshi y concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia, Vicent Sarrià, que subraya que la mencionada cantidad "proviene de una Relación de Puestos de Trabajo anterior", es decir, que se fijó antes de la llegada del actual tripartito al Gobierno de la ciudad tras las elecciones de 2015.
"El salario no es algo que se haya planteado ahora en la entidad. Venía ya dado con el presupuesto y no se consideró que correspondiera ninguna modificación", explica el edil socialista sobre el sueldo del gerente, que percibe un 10% más de lo que ingresa el alcalde de Valencia, Joan Ribó -cuyo salario, según comunicó el propio dirigente, se sitúa en los 80.000 euros brutos anuales-.
El Consistorio -en concreto el concejal de Hacienda, Ramón Vilar, también del PSPV- ha puesto la lupa sobre los sueldos de los altos cargos de sus fundaciones y organismos autónomos para evitar estas circunstancias heredadas del ejecutivo anterior. "Pero en el caso de la Emshi se trata de una entidad autónoma no dependiente del Ayuntamiento", subraya Sarrià.
"Con la Emshi es justo al contrario: Valencia no la controla, sino que forma parte de la entidad junto a otros municipios de l'Horta, que tienen un voto ponderado en función de sus habitantes", agrega el concejal, si bien reconoce que la ciudad es "la minoría mayoritaria" -circunstancia que hizo valer el propio Sarrià para hacerse con la presidencia-. El presidente de la Emshi, en este sentido, agrega que el sueldo de Juste "se estudiará en la junta de gobierno".
Sobre el perfil de Juste, Sarrià destaca que, pese a que accedió al cargo durante la legislatura anterior, se trata precisamente de "la persona que entró para gestionar el desastre del anterior gerente" -en alusión al quebranto millonario causado por los anteriores gestores en Emarsa, la depuradora de Pinedo dependiente de la Emshi-. "Decidí mantenerlo porque había tenido una postura adecuada", afirma Sarrià.