Micó, Morera, Marzà, Sorlí y Nomdedéu, algunos referentes del Bloc. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. Después de que Ciudadanos retirara su apoyo a rebajar el listón electoral al 3% -actualmente se encuentra en 5%-, los grupos parlamentarios que sustentan al Botànic presentaron su propuesta de reforma de Ley Electoral Valenciana. Con el viento en contra –los números no dan para que esta modificación se apruebe sin el respaldo del partido de Albert Rivera en la Comunitat, ya que requiere de 66 votos a favor y el tripartito suma 54- PSPV, Compromís y Podemos registraron el pasado 14 de marzo la proposición, que acaba de recibir el criterio favorable del Consell para tramitarse.
Así, aunque la principal reivindicación de las tres formaciones era bajar una barrera electoral para hacerla "más democrática" –en palabras del síndic de los valencianistas, Fran Ferri– y "más justa" –según el portavoz adjunto del PSPV, Alfred Boix–, también existen otros cambios significativos: debates obligatorios, mailing unificado, distribución proporcional de espacios electorales, facilitar el voto de residentes en el extranjero, listas cremallera, listas desbloqueadas, subvencionar a los partidos que celebren primarias abiertas y un régimen de incompatibilidades para que quien sea concejal, no pueda ser a la vez diputado autonómico.
Aunque no está claro que los partidos estén dispuestos a validar el resto de reformas -siempre y cuando Ciudadanos diera su apoyo- y renunciar exclusivamente al 3%, ya hay formaciones que aseguran que aplicarán algunas de estas obligaciones en sus filas. Así, fuentes del Bloc aseguran que en 2019 "no habrá ningún diputado o concejal" de sus siglas que ostente un doble cargo. Quien se dedique a la vida municipal, lo hará exclusivamente. Y quien desarrolle sus iniciativas en el parlamento valenciano, también. Pero no habrá opción de combinarlas "porque los estatutos lo recogen así".
Una situación que actualmente afectaría a diputados como Jordi Juan, que ocupa la Alcaldía de Tavernes de la Valldigna. Precisamente, el edil fue uno de los que se pronunció abiertamente en contra de incluir este cambio en la nueva LEV. En una entrevista concedida a Valencia Plaza, Juan aseguró que no veía "la necesidad de elevar la incompatibilidad de diputado y concejal a rango de ley". Unas declaraciones que evidenciaban las discrepancias surgidas a razón de esta propuesta en el seno del grupo de la coalición valencianista.
La decisión del Bloc para con sus futuros cargos a partir de la próxima legislatura hubiese afectado también a la alcaldesa de Carlet, María Josep Ortega. No obstante, ya hay quien en las filas de los nacionalistas se ha adelantado a esta exigencia. La parlamentaria Teresa García abandonó su cargo como delegada de Medio Ambiente y Presidencia del Ayuntamiento de Sagunto el pasado verano.
