VALÈNCIA. El personal laboral del Hospital de La Ribera amaga con una huelga si no se llega a un acuerdo con la Conselleria de Sanidad para aprobar una nuevo convenio colectivo tras finalizar el del pasado año. Así se señaló en la asamblea informativa organizada este martes en el Hospital de La Ribera por el comité de empresa para tratar la negociación y la problemática del personal a extinguir. En el encuentro, que reunió a más de un centenar de profesionales, estuvieron presentes los representante de los sindicatos Cemsaste, SAE, UGT, CSIF, Simap y CCOO.
"Si yo dijera que mañana hay una huelga, ¿quién estaría dispuesto?", señalaba un representante sindical tras varios minutos de reunión en la que varios trabajadores pedían medidas de presión con el departamento de Ana Barceló si no conseguían mantener y mejorar sus derechos. Una pregunta rotunda que llegaba tras la manifestación de descontento de varios trabajadores y un clamor generalizado con la situación que vive en el centro el personal a extinguir.
Durante el encuentro se expusieron las negativas de la conselleria para permitirles ampliaciones a jornada completa, promoción interna o jubilación anticipada. Ante el escenario, los trabajadores pusieron sobre la mesa medidas progresivas de presión, desde concentraciones y paros hasta llegar a una posible huelga si nada de lo propuesto desde Sanidad les beneficia, actuaciones que acordarán en próximas reuniones.
"Vemos como el convenio se incumple sistemáticamente, no nos dan permiso de formación, no hay promoción interna, hay problemas con los permisos, retrasos con los incentivos, disparidad entre jornadas, la carrera profesional y todo esto nos lleva decir que la sensación que tenemos desde el comité de empresa es que las cosas no están bien", señalaban desde la representación de los trabajadores.
El comité de empresa se reunió de nuevo este lunes con la Conselleria de Sanidad y destacó el buen talante del subsecretario, David Fernández, aunque reconocieron que desde la conselleria se habían marcado muchas líneas rojas respecto a los derechos del personal a extinguir. "La conselleria dice en base a unos informes jurídicos que no se puede promocionar, que no se pueden hacer prejubilaciones, son sus líneas rojas y pensamos que se extralimitan con esas intenciones", insistían.
Según los sindicatos, el planteamiento de la conselleria se basa en la imposibilidad realizar cambios contractuales, por lo que cierran muchas puertas. "Es muy complicado llegar a un acuerdo en el que no nos pueden dar nada", reconocían. "En nuestros convenios hay líneas rojas que no se van a cumplir y que avalan con sus informes". Sin embargo, recordaban que no es la primera vez que se contradicen los informes de la Abogacía de la Generalitat con el Tribunal Superior de Justicia Europeo.
Además, criticaron la falta de comunicación con Sanidad al no tener la mayoría del tiempo un interlocutor valido. "Aquí te escuchan pero no pueden tomar decisiones", apuntaban respecto a los mandatarios del departamento. "La poca interlocución por parte de la conselleria nos llevó a convocar esta asamblea". También criticaban la periodicidad de una mes en las que enmarcan las reuniones, insistiendo en la lentitud que esto supondría para la negociación.
La misión del nuevo convenio colectivo del personal laboral es integrarse en el sistema. "Tenemos entre manos un convenio de integración y de homogenización de condiciones", apuntaban. "Tenemos muchos problemas en el día a día porque hay diferencias entre las jornadas, entre los permisos, entre cómo se cogen y por eso esto es un convenio de integración, porque tenemos que ir a confluir al mismo lugar. Me da igual que me llames personal a extinguir que estatutario. Las condiciones tienen que ser más o menos parejas para que esto pueda facilitar el día a día", recalcaban.
"Estamos en segunda división. Tenemos un cisma con el mundo estatutario. El convenio está en vigor en todos sus términos para nosotros y este comité va a defender cada artículo como tiene que defenderlo, porque es un logro nuestro. Si la administración no nos lo da, cualquier de los sindicatos tiene sus servicios jurídicos y tenemos demandas interpuestas. El problema es que se demora y acarrea un lastre tremendo", reconocían.
Recordaban que actualmente existen demandas interpuestas por jubilación parcial, por carrera profesional, por la retribución o por conciliación familiar. "Las sentencias tardan pero irán poniendo luz sobre las cuestiones". Sin embargo, reconocía que no es el camino, que debe establecerse por la vía de negociación.
Actualmente, el 55% del personal del centro es laboral. "Hemos perdido el miedo. Basta ya y vamos a luchar por nuestros derechos y por nuestro futuro", apuntaba uno de los representantes. "Esto es una cosa positiva. Nos han subrogado, pero por eso no tenemos que dar las gracias a nadie. Esto es la ley. Lo recogía el pliego de condiciones, el convenio, el estatuto de los trabajadores y se respeta el contrato, como dice la normativa", destacaba. "Nosotros hemos creado puestos estatutarios porque no existían y ahora hay 2.000 en el departamento. Que no nos lapiden y nos den las gracias, porque por eso las bolsas van rodando", insistía.
