Este lunes, se hizo público que el departamento que lidera Elena Cebrián deberá afrontar en menos de seis meses un pago de 6,2 millones de sanción
VALENCIA. El Gobierno valenciano está recogiendo la herencia envenenada del anterior Ejecutivo en diversos departamentos y, en algunos casos, en forma de sanciones de la Unión Europea. Al margen de casos como el del Aeropuerto de Castellón o la Ciudad de la Luz, se han hecho públicos otros donde la multa procedente de Bruselas es inminente: como los casi 19 millones de euros por las llamadas facturas en el cajón de sanidad y, este mismo lunes, los 6,2 millones que, según denunció la consellera de Agricultura, Elena Cebrián, le tocará pagar al Gobierno valenciano debido a "deficiencias en los controles fundamentales" en diversas líneas de las ayudas agrarias entre 2007 y 2011.
Pero el problema es todavía peor. Fuentes del departamento de Agricultura señalaron a este diario que en el próximo ejercicio también se espera una nueva sanción por parte de la Comisión Europea en relación a las ayudas agrarias. Una multa que, a juicio de altos cargos de esta conselleria podría situarse entre los 12 y 15 millones de euros.
En este sentido, cabe recordar que la Comisión Europea tiene unos reglamentos de controles desde que se formó la Política Agraria Común (PAC). En la Comunitat Valenciana, se han realizado auditorías en las que se han detectado fallos tanto en las propias convocatorias como "deficiencias en los controles fundamentales", precisamente en este apartado es donde se sitúa el grueso de la sanción, casi 4,8 millones de euros. En total,son 6,2 millones de euros que la Generalitat deberá afrontar, según subrayan fuentes de la conselleria, en un plazo de seis meses dado que, de no ser así, comenzarían a contabilizarse intereses.
Sobre estas sanciones, desde el departamento que lidera Elena Cebrián lamentan que en los últimos años no se haya dado "importancia a los controles". "La Unión Europa ha hecho su trabajo pero aquí no ha habido equipos adecuados en cantidad y calidad ni los medios técnicos suficientes para llevar a cabo los controles", comentó a Valencia Plaza el secretario autonómico de Agricultura, Francisco Rodríguez Mulero.
En esta línea, Rodríguez Mulero recalcó que el Gobierno valenciano había tenido un problema de "mala gestión" y, además, de "poca visión". "No invertir en material y personal ha descapitalizado el músculo de la Administración pública. Si se hubieran destinado los recursos suficientes en su día, tal vez un gasto de un par de millones de euros hubiera evitado costes totales en sanciones que pueden llegar a los 20 millones de euros", recalcó, si bien añadió que habrá que esperar para ver las decisiones que se van tomando desde Europa.