El Cs de Emilio Argüeso intenta exhibir músculo tras hacerse con los asesores de Alicante 

ELCHE. Después de una semana convulsa en Ciudadanos en la que en Elche se cerraba el asunto del cargo de confianza —motivo de disputas y tensiones internas, que aún siguen dependiendo de los frentes abiertos— y en la que el secretario de Organización autonómico de Ciudadanos, Emilio Argüeso, con la colaboración del responsable de Institucional, Jesús Gimeno, aprovecharan la salida de Toni Cantó de vacaciones para colocar a sus asesores en la Diputación de Alicante, Argüeso culminaba la semana con una comida el martes 13 en el Huerto del Cura ilicitano.

Tras el desembargo realizado en la Diputación, el objetivo de Argüeso y sus cargos más afines era exhibir ese músculo en Elche, mostrando las fuerzas con las que cuenta. Eso sí, más en clave autonómica que ilicitana, aunque también sirvió de aviso a navegantes tras la jugada del portavoz local, Eduardo García-Ontiveros, de haber colocado a una persona de su confianza —Irene Ripoll— y no de la de los Crisol y el propio Argüeso, Paz Gallud. Una comida con alta representación de cargos públicos, con miembros de diversos consistorios de la provincia de Alicante. Sin embargo, dependiendo de las fuentes consultadas, el relato de esa exhibición de músculo es relativo. Pese, el acto supone un acto de fuerza en toda regla para futuras decisiones y para que se respeten qué decisiones que emanan desde València o Madrid.

Por parte de los argüesistas fueron 208 los asistentes a la comida, después de haber convocado para 120 personas y prever el mismo día a 150. Sin embargo, los contrarios a Argüeso, señalan que se quedó en una reunión de entre 130 y 140 personas, además después de una salida importante de gente de un grupo de WhatsApp en el que había algo más de 200 personas. Asimismo, las mismas fuentes señalan que sobre todo los asistentes eran cargos públicos en la administración o cargos del partido, pero poca asistencia de militantes de base. De hecho, señalan que de Elche apenas fueron afiliados. 

Tampoco estuvo Emigdio Tormo, una de las corrientes enfrentadas a Argüeso, ni obviamente el portavoz ilicitano García-Ontiveros, después de las tensiones con su sector por el nombramiento de la funcionaria de empleo, además de que tenía que cumplir con la recepción en alcaldía a las autoridades invitadas al Misteri d'Elx. Así pues, y según las fotos, parece lejana la cifra de los más de 200 personas reunidas según el sector de Argüeso. En cualquier caso, reunió a más de 130, que es lo que se tendrá que medir si es suficiente o no para esa exhibición esperada. 

Como ocurrió con las elecciones a nivel nacional, la batalla por el relato es importante, y las dos partes venden una versión sobre lo ocurrido en la comida del martes. Lo que queda fehaciente es en cualquier caso que a pesar de que se han superado escollos como el de Elche —y Eva Crisol también quiere trabajar conjuntamente desde ya para la legislatura—, siguen vigentes las peleas por el poder en Ciudadanos.