MADRID. Aquellos que sean supersticiosos encontrarán en los 13 euros una gran razón de peso para establecerla como resistencia clave en la tendencia de grado mayor. Al fin al cabo, este es el número 'maldito' que ha frenado la cotización de la operadora hasta en tres ocasiones, desde los máximos alcanzados en el 2000, ajustados dividendos.
Por tanto, podríamos afirmar que entre esa zona y los 7 euros por la parte baja la tendencia principal no termina de definirse. Sin embargo, en los grados intermedios, el precio ofrece importantes oportunidades. Así, por encima de los 9,50 euros podemos establecer un doble suelo con origen junio de 2016, y soporte de relevancia 7,15 euros.
Por ello, de cara al medio plazo -próximos meses- el objetivo teórico que nos confirma el patrón antes mencionado podríamos establecerlo en los 11,85 euros. Al mismo tiempo, y en plazos más cortos, podemos considerar que entre los 10,63 y 9,50 euros, el desarrollo actual es de consolidación del tramo alcista situado en 10,63-7,15 euros.
Operativamente hablando los 9,50 euros debería ser zona de modulación de la posición, mientras el objetivo para las próximas semanas deberíamos establecerlo en los @ 10,63 euros.
Óscar Germade es analista de BNP Paribas