VALÈNCIA. De hotel a residencia de estudiantes. El solar ubicado en el cruce de la Avenida Tarongers con Ingeniero Fausto Elio, en el que la crisis detuvo la construcción de un Hotel AC y dejó estancadas las obras hasta la actualidad, fue traspasado hace unos meses a un grupo inversor de capital inglés que tiene previsto un nuevo uso para el inmueble.
Así lo confirman a Valencia Plaza fuentes de los hasta ahora propietarios, entre los que se encontraba el empresario Javier García Obregón, la propia cadena AC y un tercer socio patrimonialista. Según explican a este diario, "la intención del nuevo dueño era desarrollar una residencia de estudiantes, un mercado con demanda y en un lugar idóneo junto a las universidades".
Fuentes municipales agregan en la misma línea que el nuevo accionista -cuya identidad prefieren no revelar los vendedores- se dirigió al Ayuntamiento de València para confirmar la compatibilidad del nuevo uso, que sí entre entra las posibilidades de este suelo integrado en el Plan Cabanyal.
El espacio cuenta con un aprovechamiento de más de 5.000 metros cuadrados, y en el proyecto inicial estaba previsto en el lugar la construcción de un complejo hotelero de alrededor de 75 habitaciones de categoría cuatro estrellas.
La construcción, hasta el momento en el que cesaron los trabajos, alcanzó a la cimentación y los sótanos del edificio, pero no fue más allá. Con la llegada de la recesión las obras permanecieron detenidas durante años tras una valla metálica que estrechaba la acera, sustituida posteriormente por un muro.
En consecuencia, al encontrarse todas las plantas superiores por desarrollar, los nuevos dueños están a tiempo de adaptar el proyecto hacia su nuevo uso, si bien también está previsto que, en línea con la disposición hotelera, el inmueble lo conformen estancias de pequeño tamaño.
El nuevo proyecto para el lugar, atendiendo al mercado inmobiliario actual, es un claro acierto. El escenario hotelero en la ciudad de València ha tendido hacia el desarrollo de proyectos lo más céntricos posible, un incremento de la oferta que podría hacer sufrir a los hoteles más alejados del núcleo en caso de que mengüen las pernoctaciones en la ciudad.
Por contra, el auge del alquiler residencial tanto en operaciones como en el precio de las rentas ofrece más garantías de ocupación a las residencias de estudiantes, máxime en un emplazamiento ubicado junto a dos grandes centros universitarios (la UPV y la UV) y con el atractivo de su cercanía al paseo marítimo.