opinión

El 'indicador' Netflix

En los últimos resultados de Netflix se ha evidenciado que la caída de suscriptores es la evidencia de una recuperación social y laboral. ¿Por qué? Porque la parte económica está muy lejos de estar al alcance de la mano

26/04/2022 - 

MADRID. El sector de la retransmisión de contenido online o 'streaming' -como se le conoce por su nombre en inglés- es un mercado con menos de 10 años de vida. Es la deriva o evolución del tradicional alquiler de contenido físico que hacíamos de películas en VHS, DVD o Blue-Ray, según la edad que tengamos. Su evolución se produjo gracias a la digitalización y, entre otros, a la lucha contra la piratería. Algo de lo que ya prácticamente no se habla porque cada contenido digital es marcado con la 'huella digital' de los usuarios que descargan el contenido y es más fácil localizar al infractor.

Pero estas líneas no tratan sobre eso, simplemente son una introducción para saber cuál es el origen de una de las compañías más exitosas de los últimos años y que ha tenido un gran impacto y crecimiento gracias a la pandemia. Y es que las horas muertas en casa sin poder salir -no hay nada interesante en la televisión, los telediarios deprimentes por las noticias sobre la pandemia y un ocio limitado dentro de las cuatro paredes- pueden sacar de quicio a cualquiera. El nuevo status quo de la sociedad a nivel mundial generó una inexorable modificación de nuestras costumbres. Y Netflix entró en juego.

Vamos a hablar de Netflix porque fue la pionera y a día de hoy sigue siendo la referencia al suponer más del 40% del mercado del 'streaming'. Pero otras compañías también se sumaron a una oferta de contenido de un mercado en crecimiento. Durante estos dos años de pandemia, el número de suscriptores ha sido el termómetro referente para identificar cómo de conectados estamos a internet; o, de otra manera, cómo de desconectados estamos de la realidad palpable y de la normalidad, social, laboral y económica.


En los últimos resultados de Netflix se ha evidenciado que la caída de suscriptores es la evidencia de una recuperación social y laboral, porque la parte económica está muy lejos de estar al alcance de la mano. De hecho, uno de los factores a los que se le atribuye esta caída de los suscriptores es la desaceleración económica causada por la inflación donde servicios superfluos están dejando de contratarse. 

Cada vez son más los consumidores de menor renta disponible para hacer frente a sus necesidades primordiales. En este aspecto, no vamos a tener en cuenta las competencias porque en términos generales estamos hablando del sector y no sólo de Netflix. Probablemente cuando se conozcan las cuentas de Disney, Apple o Amazon, los servicios de suscripción de contenidos no mostrarán unas buenas cifras.

El 'efecto ruso'

Ni siquiera el impacto de la eliminación por sanciones de los suscriptores rusos es una justificación. Dado que si no los tuviéramos en cuenta en el impacto de esos 200.000 suscriptores menos -datos publicados por Netflix en su informe de resultados-, el crecimiento hubiera sido de 500.000 suscriptores. Se trata de una cifra muy alejada de los 2,5 millones que esperaba obtener la compañía. Es evidente que la gente ya está menos en casa, vuelve a trabajar, mientras el teletrabajo se está incorporando a las empresas a un ritmo lento y la economía intenta volver a la normalidad.

Pero cuidado que vienen curvas. Los bancos centrales van a pisar el acelerador sin excepción -por su puesto incluimos al BCE-, y eso va a ocasionar un proceso de recesión en la economía . El mismo que nos devolverá desde el punto de vista bursátil y macroeconómico a niveles muy inferiores a los vistos antes de la pandemia.

Pero la culpa es de Putin (palabras textuales de Joe Biden). En fin…

Darío García es analista de XTB

Noticias relacionadas