El juzgado recibe la pericial siquiátrica de Alcón pero no la notifica a las partes

VALÈNCIA. La pericial siquiátrica realizada a la exconcejal del PP de Valencia, María José Alcón, ha abierto una brecha entre el juzgado que investiga el presunto blanqueo de capitales y la financiación irregular del PP de València y los imputados dentro de la conocida como Operación Taula. El pasado viernes se notificó a las partes que la diligencia había llegado al juzgado, sin embargo la pericial no iba adjunta a la notificación, lo que ha molestado, y mucho, a los abogados de los imputados.

Este lunes, varios de los letrados se han personado en el juzgado para solicitar que le dieran copia de dicho informe, pero la funcionaria se ha negado a entregarlo aduciendo que el juez no ha dado orden de notificarlo, ni hacer copia del mismo y que, además, está en funciones de guardia el juzgado y, por tanto no hay nadie para notificar.

Según ha podido saber Valencia Plaza, el letrado del asesor del PP, Luis Salom, ha presentado un escrito solicitando dicho informe pero la respuesta ha sido la misma que al resto de letrados, no habrá informe mientras el magistrado no lo acuerde. No se descarta que más partes presenten escritos en contra del criterio marcado hasta ahora por el juzgado.

El informe

El nerviosismo se ha hecho patente durante la jornada ya que, según las defensas, el contenido y la valoración de los forenses que han hecho la pericial siquiátrica podría suponer un antes y un después en la instrucción de la causa. Las posibilidades de que los forenses declaren a Alcón “no imputable” son escasas, pero el hecho de que puedan haber relatado algún tipo de inestabilidad mental a la que las partes puedan agarrarse para tratar de desacreditar y dejar sin efecto las declaraciones y las grabaciones en las que la concejal asumía que había blanqueado dinero para el PP de Valencia no son nada desdeñables.

La presunta inestabilidad mental de Alcón ha sobrevolado la causa desde que las grabaciones de la Unidad Central de la Guardia Civil se hicieron públicas. Además, a ello hay que sumarle que cuando las citadas declaraciones se realizaron, la exconcejal se encontraba ingresada en un centro médico por sus dolencias mentales, un hecho que llevan a las partes a pensar que no era consciente de lo que decía cuando fue grabada.

en el caso de que las escuchas a Alcón fueran anuladas, la Fiscalía todavía contaría con la declaración de los cuatro testigos, la confesión de una asesora y la documentación recabada por la Guardia Civil

Pese a que las escuchas telefónicas son lapidarias, en el hipotético caso que fueran anuladas, la Fiscalía todavía contaría con la declaración de los cuatro testigos que se negaron a presuntamente blanquear dinero, la confesión de una asesora que aseveró que la habían obligado a blanquear el dinero, un anónimo que llegó a la Fiscalía Anticorrupción denunciando los hechos y toda la documentación recabada por la Guardia Civil desde que comenzó la investigación.

La presunta inestabilidad mental de Alcón ha sobrevolado la causa desde que las grabaciones de la Unidad Central de la Guardia Civil se hicieron públicas. Además, a ello hay que sumarle que cuando las citadas declaraciones se realizaron, la exconcejal se encontraba ingresada en un centro médico por sus dolencias mentales, un hecho que llevan a las partes a pensar que no era consciente de lo que decía cuando fue grabada.