VALÈNCIA. El Lipofilling o técnica de Transferencia de Grasa Autóloga, es decir, proveniente del propio paciente, viene de la mano de la liposucción. Esta no ha de ser entendida como una técnica para bajar peso sino para moldear la figura, evitando grandes aspiraciones de tejidos que podrían provocar flacidez como efecto secundario. Precisamente, en ocasiones no se trata de retirar tejido graso sino de añadirlo en puntos estratégicos para realzar la silueta del paciente o mejorar el estado de su piel.
Hablamos con José Folch, doctor de Clínica Dual, clínica de cirugía y estética de Valencia, sobre las bondades del Lipofilling como la gran alternativa a los rellenos corporales y faciales tradicionales.
Doctor, ¿en qué consiste la técnica del Lipofilling?
El Lipofilling es una técnica de relleno corporal y facial en la que, en vez de emplear sustancias de relleno sintéticas o implantes para dar volumen a determinadas zonas del cuerpo, utilizamos el tejido graso del propio paciente (grasa autóloga) extraído mediante liposucción. En los últimos años hemos visto cómo se ha perfeccionado esta técnica de injertos de tejido adiposo. Entre sus ventajas tenemos que su efectividad y durabilidad son mucho mayores que la de los rellenos tradicionales, y la ausencia de rechazo al tratarse de tejido perteneciente al mismo paciente. También hay que destacar el aspecto natural de los resultados, ya que el relleno se adapta al tejido de la piel, mejorando su hidratación y su aspecto.
Bien utilizada, es una técnica con múltiples indicaciones, capaz de conseguir unos resultados predecibles y, a su vez, potenciarlos en aquellas indicaciones en las que otras técnicas pueden mostrarse insuficientes.
¿Es una técnica compleja?
La utilización de injertos de tejido adiposo puede parecer sencilla a priori, pero se necesita respetar ciertos aspectos de la técnica, pues no observarlos podría hacer que no alcancemos los objetivos deseados o incluso que aparezcan complicaciones. Si queremos obtener los mejores resultados es necesario emplear una técnica muy meticulosa: por ejemplo, utilizamos anestesia sin vasoconstrictor, realizamos una infiltración o tumescencia abundante, y reintroducimos la grasa mediante finas jeringuillas con poco volumen en las zonas receptoras, que nos garantizan una menor agresión sobre la zona donde vamos a implantar el tejido lipoaspirado.
En resumen: el Lipofilling requiere de un conocimiento especializado por parte del médico que lo va a aplicar.
¿Es necesario hacerse cada vez una Liposucción para el Lipofilling?
No necesariamente. Podemos preservar el tejido graso aspirado gracias a la crio-conservación del tejido adiposo (banco de tejidos en frio), que permite ahorrar al paciente un proceso quirúrgico, obteniéndose todo el tejido en el primer procedimiento, pudiendo seleccionar el paciente el momento en el que quiere realizarse el segundo proceso, e incluso conservar el material para futuras indicaciones.
¿En qué casos está indicado este tratamiento estético?
La técnica del Lipofilling presenta múltiples indicaciones, como son: corrección de cicatrices, atrofias, relleno de tejidos (facial, mamario, glúteos, gemelos, manos…), o mejorar de la calidad de la piel.
¿Y cuánto duran sus efectos?
Podríamos decir que los efectos del Lipofilling son de por vida, pero habríamos de matizar. Ciertamente, los rellenos con grasa autóloga tienen una gran ventaja sobre los materiales de relleno reabsorbibles tradicionales que tenemos actualmente en el mercado, ya que la mayoría de estos difícilmente superan el año o dos años, mientras que el tejido graso que sobrevive al proceso permanece de por vida.
El matiz está ahí: no todo el tejido graso del relleno sobrevive al proceso, y la proporción en que lo hace varía de forma importante según cada paciente y técnica utilizada, ya que cada cuerpo es diferente e influye mucho el estado del tejido receptor.
Actualmente estamos consiguiendo supervivencias medias cercanas al 70-80% del volumen implantado.
También se ha visto que el enriquecimiento del tejido graso con los factores de crecimiento plaquetarios obtenidos de la propia sangre del paciente en el mismo acto quirúrgico, o el enriquecimiento con células madre, potencian la integración del máximo volumen posible del injerto. Actualmente añadir estas tecnologías encarece el coste del tratamiento.
¿Hay algún detalle que quisiera añadir?
Sí, referido no tanto a la técnica de Lipofilling como a la de Liposucción. Cuando aconsejamos a un paciente la técnica de la Liposucción, le avisamos que esta intervención conlleva el tener que cuidarse: dieta, ejercicio, hidratación, a fin de evitar recaídas. La misión de la Liposucción no es tratar la obesidad sino eliminar los excesos de grasa acumulada en diferentes zonas y sobre todo la de difícil eliminación con dieta y ejercicio.