Los directores del evento aseguran que hay "ocho informes positivos y uno negativo" y que se está actuando "de mala fe"
VALENCIA (EP/VP). La organización del festival de música electrónica Marenostrum, previsto entre el 8 y el 10 de julio en el paraje Els Peixets de Alboraya (Valencia), ha defendido que no ha habido ilegalidades en la tramitación del evento, que han recibido todas las autorizaciones favorables a excepción de un informe de la Conselleria de Vivienda, y ha lamentado que se vean en una "guerra política" entre PSPV y Compromís en este departamento.
En todo caso, los directores del festival han anunciado que el evento "va para adelante" ya que pueden demostrar con documentación que se puede celebrar, han trabajado "muy duro", han pagado lo correspondiente a los agricultores, han limpiado la zona, crearán trabajo y tienen un contrato por cinco años.
"Me parece bien que quieran hacer política y que sean unos de Compromís y otros del PSOE y que no se hablen, pero que lo paguen entre ellos", han indicado en un encuentro con los medios los responsables del Marenostrum, en el que han acusado a la administración de actuar "con mala fe" por haber dado el informe desfavorable, recibido en el Ayuntamiento de Alboraya, a cinco días de la celebración del evento, cuando ya estaba "todo montado" y la autorización se pidió en enero.
El informe, de la Dirección General de Obras Públicas de la Conselleria de Vivienda, considera que el emplazamiento afecta a la zona de protección de dominio público por lo que vulnera la Ley de Costas.
El festival anunció el pasado mes de mayo el traslado del evento desde el Grao -donde en la edición de 2015 reunió a 27.000 personas-- al paraje de Els Peixets, lo que provocó críticas de entidades vecinales y colectivos ecologistas así como de partidos políticos.
Los responsables del Marenostrum han asegurado que, ante la situación generada, se sienten "desprotegidos" y han lamentado la "mala fe" ya que habían pedido la autorización en enero y han recibido un informe desfavorable "a cinco días, con todo montado". Además, han afirmado que se alegan tres motivos para ello que no son verdad.
"Lo tenemos todo legalizado pero estamos expuestos y asustados porque recibimos presiones", han dicho, para afirmar que son "títeres en manos políticas". Así, han criticado que, pese a que están dando todos los pasos que establece la ley, están "desamparados". "Queremos que la gente sepa que hay ocho informes positivos contra uno negativo", que quedaría contrarrestado por los de distintas administraciones como CHJ, Ayuntamiento o Gobierno, entre otros, han insistido. Además, han recalcado que el de la Dirección General no se sostiene si se profundiza en las causas.
Por otro lado, han criticado que, pese a haber llegado acuerdos con EMT y FGV para dar servicio al festival, finalmente les han comunicado que no será posible por "tema políticos".
